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Bush ya diseña la primera acción de "la guerra del siglo XXI"
El gobierno advirtió que su combate contra el terrorismo no será una represalia aislada: piensa en una campaña prolongada y masiva. La mayor investigación de la historia busca ponerle rostro al enemigo, que ya tiene al menos un nombre: Bin Laden. En tanto, EE. UU. sigue buscando sobrevivientes y tratando de volver a la normalidad.
Con centenares de muertos confirmados y casi 5.000 desaparecidos en los atentados con aviones secuestrados, el presidente George W. Bush declaró ayer que Estados Unidos y sus aliados están decididos a ganar "la primera guerra del siglo XXI" desatada por el devastador ataque suicida que destruyó a los dos edificios más altos de Nueva York y una parte del Pentágono, sede del poder militar estadounidense en Washington.Ya se adelantó que Estados Unidos responderá a los ataques terroristas con una campaña militar prolongada, en lo posible en coalición con sus aliados, y no se reducirá a ataques aislados.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Colin Powell, confirmó por primera vez que Washington sospecha que Osama bin Laden, el millonario fundamentalista islámico de origen saudita escondido en Afganistán, pudo haber sido el autor intelectual de los ataques, pero dijo que aún no ha identificado qué grupo fue responsable.
Mientras tanto, casi 7.000 agentes del FBI y de la inteligencia comenzaron a investigar el ataque. Las autoridades identificaron a 18 pasajeros con nombres árabes que secuestraron cuatro aeronaves con cuchillos y amenazas de bombas, logrando estrellar dos contra las Torres Gemelas de Nueva York y uno contra el Pentágono, símbolos del poderío financiero y militar de Estados Unidos.
En Nueva York, el alcalde, Rudolph Giuliani, dijo que 4.763 personas estaban desaparecidas a raíz del desplome de los rascacielos de 110 pisos. Hasta el momento se han recuperado 94 cadáveres y restos humanos. El el número de muertos en el Pentágono ascendería a 190.
Los mercados de valores siguieron cerrados ayer por tercer día para que el centro financiero se recuperara de la devastación . Reabrirán el lunes. La aviación comercial se reanudó antes del mediodía cuando las autoridades aeronáuticas reabrieron los aeropuertos, bajo severas medidas de seguridad. Ocho horas más tarde, las autoridades cerraron de nuevo los tres aeropuertos de Nueva York a pedido de la policía.
En Washington, la policía ordenó la evacuación del Congreso por una hora después de encontrar paquetes sospechosos, lo que aumentó el clima de incertidumbre que vive Estados Unidos.
El subsecretario de Defensa, Paul Wolfowitz, informó ayer que el presidente estadounidense, George W. Bush, tiene una amplia gama de opciones para responder a los atentados terroristas del martes, y aseguró que la respuesta será "una acción militar sostenida". Incluso, algunos no descartan la utilización de tropas de tierra, después que el Pentágono se analizara la convocatoria de reservistas.
"Esta campaña militar será mantenida hasta que esa gente (los terroristas) y quienes los apoyan cesen en sus actividades", advirtió Wolfowitz. "Una cosa debe quedar clara, esto no será un solo ataque, será una campaña y no importa cuán dramática sea", precisó el número dos del Pentágono.
Las opciones militares que se barajan son muy amplias, desde bombardeos con aviones B-2, lanzamiento de misiles o el envío, incluso, de grupos de elite de operaciones especiales.
El portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, explicó que Bush no necesita que el Congreso apruebe una declaración de guerra si se decide lanzar un ataque de represalia. El portavoz de la Casa Blanca agregó que con la aprobación de una resolución conjunta del Congreso en apoyo del presidente y de repulsa de los atentados sería suficiente para dar a Bush la luz verde.
Sin embargo, al mandatario estadounidense le gustaría una resolución sobre el uso de la fuerza "como demostración de la unidad del país", agregó Fleischer.
Sea cual sea la respuesta de EEUU a los atentados del martes, el portavoz añadió que Bush asume que "el enemigo actual es bien distinto, no tiene rostro definido, no tiene fronteras. Es un enemigo propio del siglo XXI".
Pero los investigadores, desde el comienzo, orientaron sus sospechas hacia Bin Laden, a quien EEUU le considera responsable de los atentados de 1993 contra las Torres Gemelas; de 1996 contra las Torres Khobar en Arabia Saudí; y de 1998 contra las embajadas de Washington en Kenia y Tanzania.
Bin Laden pueda estar escondido en Afganistán, y este país es el primero en la lista de posibles objetivos, a pesar de las dificultades para detectar la exacta ubicación del millonario saudí.
En principio, EEUU tiene la intención de pedir el respaldo de la OTAN y de otros países aliados para llevar a cabo la represalia.
El subsecretario de Defensa dijo que Bush consulta con los aliados sobre la situación A pedido de EE.UU, diplomáticos de Rusia, India, Irán, Uzbekistán e Tajikistán, - países hostiles al gobierno Talibán afgano- se reunieron ayer en Dushanbe para analizar cómo contribuirán al combate contra el régimen de Afganistán.
Tajikistán, que posee una larga frontera común con Afganistán, cuenta con protección rusa, que reforzó su seguridad con un importante contingente militar ante las amenazas de los integristas islámicos apoyados por el régimen de Kabul.En la cumbre participaron también representantes de los grupos armados que combaten contra los Talibán en territorio afgano.
En este sentido, Bush pidió ayer a Paquistán que cierre las fronteras y permita a los aviones norteamericanos sobrevolar sus cielos en un eventual escenario de ofensiva contra Afganistán. El presidente paquistaní, general Pervez Musharraf, ya tomó distancia del régimen Talibán, al que hasta el martes apoyaba, y declamó su alineación con Estados Unidos. (EFE/Reuters/ANSA)
Creen que habrá más bombas
Dos tercios de los estadounidenses están convencidos de que los atentados terroristas no concluirán con los ataques del martes en Washington y Nueva York, según un sondeo de la cadena televisiva NBC.
Según el trabajo, el 66% de los consultados espera un nuevo atentado de la misma organización que perpetró los ataques del martes contra el World Trade Center y el Pentágono.
El sondeo también muestra que el 80% de los ciudadanos apoya la actuación ante la crisis por parte del presidente George W. Bush, pero el 50% estima que la respuesta a los ataques "no será la adecuada".
También el 66% de los consultados considera que los atentados fueron más graves que el ataque japonés contra Pearl Harbour
Un 20% de la muestra considera que el gobierno de Bush "exagera" en cuando a la dimensión de la tragedia..
El Congreso apoyaba la ofensiva, en un clima de tensión
Washington (Télam-SNI).- El Congreso norteamericano elaboraba anoche una resolución conjunta comparable a una "declaración de guerra", anunció el senador republicano John Warner, después de una reunión con el presidente George W. Bush, a quien republicanos y demócratas brindaron todo el respaldo para una acción de represalia por los atentados del martes.
Esa resolución "tendrá tanta e incluso más fuerza y efecto que cualquier declaración de guerra nunca antes lanzada por este país", declaró Warner luego del encuentro con Bush y parlamentarios de Nueva York y de la región de Washington.
"No hay ninguna diferencia entre demócratas y republicanos y no hay ninguna diferencia entre el Congreso y el presidente", aseguró ayer el líder demócrata de la Cámara de Representantes, Richard Gephardt, para enfatizar que cualquier ofensiva militar norteamericana, que se considera inminente, contará con todo el apoyo político.
Con un mismo discurso, Bush y los líderes del Capitolio se mostraron convencidos de que Estados Unidos se vengará de los ataques terroristas perpetrados el martes contra las Torres Gemelas de Nueva York y el Pentágono en Washington.
También afirmaron que Estados Unidos no estará sólo en la represalia, porque "busca el apoyo universal para las acciones que este país tome", explicó Bush."Lideraremos al mundo a la victoria" prometió Bush en abierta proclamación bélica.
La deliberaciones se realizaron en un clima de tensión. El Capitolio (sede del Legislativo) fue evacuado a alrededor de las 17:40 hora local , aunque se volvió a permitir la entrada en el edificio 45 minutos después. La policía entró en la cámara norte del edificio, donde celebra sus sesiones el Senado, durante una votación y ordenó a los legisladores que abandonaran inmediatamente el edificio. Un portavoz policial señaló que se encontró un paquete sospechoso que finalmente resultó ser inofensivo. No dio más detalles, aunque señaló que los congresistas podía retornar a sus lugares de trabajo.
Agresiones a la comunidad árabe
Washington (EFE).- El gobierno de EEUU pidió calma a la población al multiplicarse las amenazas y agresiones verbales contra la comunidad árabe tras los atentados terroristas del martes pasado.
"Cualquier acto de violencia o discriminación contra una persona basado en su raza, religión u origen nacional de esa persona es contrario a nuestros principios fundamentales y las leyes de EEUU", dijo en una declaración el secretario de Justicia, John Ashcroft.
La declaración fue emitida cuando se multiplican las denuncias de agresiones y amenazas contra musulmanes o personas de aparente origen árabe. La última de esas denuncias provino de Los Angeles, donde la policía de California confirmó al menos nueve incidentes raciales contra la comunidad árabe residente.
Entre los delitos fueron denunciados dos casos de vandalismo, una llamada contra el centro islámico del sur de California y una pintada con la palabra "muere" en el Club Persa de un instituto.
El Pentágono podría movilizar a miles de reservistas
Washington (EFE).- El Departamento de Defensa prevé movilizar a varios miles de reservistas tras los ataques terroristas del pasado martes, informó ayer el diario The Washington Post en su versión electrónica.
El diario, que citó fuentes militares, explicó que la medida podría indicar el comienzo de una movilización militar mucho mayor para responder el ataque que se ha cobrado la vida de miles de personas en Nueva York y Washington.
Esos miles de reservistas se sumarán a unos diez mil miembros de la Guardia Nacional que entraron en servicio en las dos ciudades donde ocurrieron los dos atentados terroristas más graves de la historia de Estados Unidos.
Las fuentes militares manifestaron que los reservistas se necesitan para reforzar los patrullajes aéreos sobre las zonas metropolitanas más importantes del país.
También ocuparán ciertas funciones de apoyo a pilotos, controles de tráfico aéreo y equipos de mantenimiento de la aviación.
Agregaron que el Pentágono ya cuenta con autorización para convocar a unos 40.000 reservistas.El diario manifestó que la medida representará la primera movilización de carácter federal y que los servicios de esas unidades se requerirán en momentos en que las tropas regulares lleven a cabo las represalias contra los grupos que perpetraron los ataques.
Tras los ataques sufridos por dos embajadas estadounidenses en Africa, en 1998, EEUU lanzó de inmediato misiles cruceros contra emplazamientos presuntamente terroristas en Sudán y Afganistán, países vinculados al saudí Osama Ben Laden
Una fuente militar dijo que "las cosas son diferentes en esta ocasión. Para empezar, la escala del ataque ha sido mucho mayor. Además, no creo que el pueblo de Estados Unidos espere que la reacción sea suave". Las fuentes militares indicaron que en esta ocasión el presidente Bush y sus asesores parecen dispuestos a usar fuerzas terrestres, especialmente unidades especiales.
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