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Viernes 13 de julio de 2001 | |
 Se disparó el riesgo país a 1.520 y la Bolsa cayó 8,16% Bush sale al auxilio de la Argentina |
El gobierno busca consenso político para las nuevas medidas |
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El núcleo de la resistencia se montó alrededor de la figura de Raúl Alfonsín. |
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| El gobierno nacional salió ayer a buscar consenso para las nuevas medidas de ajuste que intentan recortar el actual déficit fiscal que presentan las cuentas públicas. Sin embargo, desde temprano encontró una fuerte resistencia a las mismas. Por la mañana comenzaron a circular por el departamento del ex presidente Raúl Alfonsín distintos referentes políticos de la UCR, quienes manifestaron su enérgico rechazo a los nuevos recortes y exigieron al gobierno que ceda más poder al ministro Cavallo dentro del Ejecutivo. Los mercados también les dieron la espalda a los anuncios. La Bolsa porteña registró una caída superior al 8%, el riesgo país perforó la barrera de los 1.500 puntos básicos y la tasas para créditos cortos o descubiertos se ubicaban en todos los casos por arriba del 200% anual. En medio de un convulsionado día plagado de rumores, el gobierno desmintió rotundamente ayer por la noche que se vayan a producir cambios en el gabinete nacional y desplegó un intenso operativo para lograr el apoyo político de dirigentes aliancistas y del justicialismo a las nuevas medidas de ajuste para eliminar el déficit fiscal. Mientras los partidos que integran la Alianza se debatían en interminables deliberaciones para resolver la postura que adoptarán frente al nuevo ajuste anunciado por el gobierno nacional, todos los sectores del PJ decidieron asumir un actitud de prudencia ante las medidas y esperar la definición del oficialismo previo a cualquier movimiento político. En el PJ, hubo coincidencias entre gobernadores, legisladores y dirigentes acerca de la necesidad de actuar con cautela y evitar cualquier movimiento político a la espera de la postura que tomen los partidos que integran la Alianza. En ese marco de absoluto silencio de radio por parte de los peronistas, el gobierno convocó a los gobernadores del PJ a un encuentro que tendrá lugar hoy a partir de las 17.00 en la residencia de Olivos, con el propósito de aclarar los detalles de las medidas y tratar de consensuar algún tipo de respaldo. Según el oficialismo, los principales mandatarios provinciales de la oposición, como el bonaerense Carlos Ruckauf y el cordobés José Manuel de la Sota, ya confirmaron su asistencia a la reunión. En este sentido, el gobierno no descarta acuerdos con el PJ para llegar a tener un consenso político que permita darle continuidad al programa de ajuste. Cavallo dio anoche el primer paso en este sentido: "Si los gobernadores apoyan los ajustes pueden ser reducidos, temporarios y muy pronto innecesarios". Por su parte, dirigentes del radicalismo y el Frepaso seguían enfrascados en permanentes reuniones, con el propósito de fijar una posición uniforme sobre el ajuste sin poner a la Alianza al borde de la ruptura. Ayer a última hora De la Rúa cenó en la Quinta de Olivos con los gobernadores de la Alianza, Alfonsín e Ibarra. Allí, Pablo Verani confirmó a este diario que se busca un consenso global para poder llegar a corregir el actual déficit que presentan las cuentas públicas. La intención del gobierno es modificar la postura ambigua que los principales dirigentes aliancistas plantearon ayer frente al ajuste, en la que evitaron una oposición abierta al nuevo plan económico, pero tampoco mostraron un respaldo decidido. En un documento difundido tras una reunión que mantuvo ayer por la mañana Alfonsín con dirigentes partidarios y frepasistas, se planteó la necesidad de "buscar consensos con otras fuerzas políticas", a fin de lograr "alternativas" frente a la actual crisis económica. Pero además hubo expresiones en favor de que "los mayores esfuerzos" para reducir el déficit recaiga sobre los sectores más poderosos. "Frente a una cruda realidad hay que actuar rápidamente a fin de estructurar propuestas que, tomando como punto de partida la restricción financiera actual, se encuadren también en un contexto en que el mayor esfuerzo deba recaer en los sectores que tienen mayores posibilidades económicas", reza un párrafo del comunicado. Tras el financiamiento Contra todos los pronósticos de desfinanciamiento, trascendió ayer que existen altas posibilidades de que el Tesoro de EE.UU. salga a apoyar con alrededor de 15.000 millones de dólares a las alicaídas finanzas públicas argentinas. Asimismo el titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Enrique Iglesias, respaldó ayer las nuevas medidas económicas, al sostener que la entidad "apoya y apoyará a la Argentina para salir de la crisis". Iglesias anunció además que en setiembre el BID liberará la segunda partida de 500 millones de dólares correspondientes al denominado "blindaje financiero", otorgado a la Argentina a fines del 2000. Por otra parte, el viceministro de Economía, Daniel Marx, reconoció ayer que el gobierno nacional analiza con el sector financiero un canje de Letras del Tesoro (Letes) por títulos de más largo plazo, que podría trepar hasta 3.500 millones de dólares. Durante el segundo semestre vencen Letes por un total de 5.400 millones de dólares, por lo que el trueque de títulos le permitirían a la Argentina estar ausente de los mercados de crédito hasta el año próximo, pues los fondos restantes podrían obtenerse mediante la emisión de bonos a colocarse entre AFJP. (DyN, Télam, AR y AV) Derogan decreto del ex ministro Machinea El decreto firmado ayer por el presidente Fernando de la Rúa y los ministros de su gabinete establece la derogación de la norma de igual rango que lleva el número 430, en la cual se reducía el 12% los sueldos de más de 1.000 pesos, y un 15 en las remuneraciones más altas de la administración pública, norma implementada durante la gestión Machinea. Ahora el sistema pasó a ser horizontal, esto es, que todos los salarios de los agentes del Estado estarán sujetos a reducciones en relación a los fondos disponibles obtenidos por vía de la recaudación fiscal, independientemente de su nivel de ingresos. Paradójicamente, la medida beneficiaría a algunos salarios, ya que al derogarse el decreto 430, se les restituye entre el 12 y el 15% y se les descontaría entre el 8 y el 10, con una mejora neta de entre 2 y 7 puntos. Le piden calma a la población |
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