Cocinar una posta de salmón de 200 g en sartén, rociarlo con 50 g de salamin cortado en finísimas láminas. Cocinar en horno a 130 grados en la misma sartén donde se selló el salmón. Incorporar 200 cm3 de vino blanco Sauvignon Blanc y dejar reducir, agregar crema de leche si se desea. Freír una girgola en abundante aceite caliente y 2 hojas de rúculas, condimentar con sal y pimienta. Asar 2 rodajas de calabaza con manteca y un poco de azúcar cortada en cubos.