En una nota publicada por este diario en relación con la soja transgénica se indica que la medida emitida por el Ministerio de Defensa "consistió en prohibir la siembra de soja transgénica en terrenos de las Fuerzas Armadas".

Es preciso aclarar que, como bien indica la resolución MD 367, esta exclusión sólo afecta a inmuebles propios "ubicados en zonas urbanas y suburbanas, así como en adyacencias de barrios e instalaciones residenciales militares".

A su vez, el comunicado emitido por este ministerio el 20 del corriente señala claramente que "los contratos a los que se refiere la resolución MD 367 se desarrollan en campos fuera de la jurisdicción del Comando de Remonta y Veterinaria".

De esta manera, queda en evidencia que la medida no atañe a todos los terrenos militares.

Dirección de Comunicación Social

Ministerio de Defensa

de la Nación

¿Recuerdan que cuando estudiaron les enseñaron que cuando tomaran conocimiento o identificaran la configuración de un delito debían actuar de oficio?

Actuar de oficio: iniciativa a tomar por un fiscal o juez de turno para abrir una investigación sin necesidad de un denunciante o causa abierta por los canales establecidos por el procedimiento habitual.

En su diario acontecer, la provincia del Neuquén muestra corte de rutas, ocupación de terrenos públicos y privados, toma de edificios públicos, agresiones a los ciudadanos por querer circular, estacionar, trabajar, defender su propiedad privada o que eduquen a sus hijos, etcétera, etcétera, amenazas de acciones delictivas anticipadas por sus organizadores en tiempo y forma a través de los medios de comunicación, degradación de las autoridades constituidas por diversas causas -inoperancia, ausencia- constituyendo la figura de incumplimiento de sus deberes de funcionarios públicos a diario... y ahora llegamos al extremo de que pueden disponer del destino de los ciudadanos limitando a su voluntad la posibilidad de vacacionar, ver a sus familiares, ir a trabajar y cuanto derecho perdido solíamos tener.

No estoy diciendo nada nuevo y no quiero aburrir.

Señores jueces: alguien tiene que comenzar; si no son ustedes, ¿quiénes? Pero les doy una idea: si no tenemos la capacidad para hacer cumplir la Constitución nacional, ¿por qué no llamamos a una Constituyente y hacemos una nueva, con muy pocos artículos?

"Art. 1º. En la República Argentina cada uno puede hacer lo que se le cante.

"Art. 2º. El que quiera trabajar que lo haga, pero deberá pagar todos los impuestos necesarios para solventar la libertad de no trabajar de los otros.

"Art. 3º. El último, cierre la puerta.

"Art. 4º. De forma".

Juan Mario López

LE 7.748.282

Neuquén

Todavía no salgo de mi asombro por la pintoresca decisión del Consejo Superior de la Universidad Nacional del Comahue de excluir del cuerpo docente al Dr. Oscar Pandolfi porque "defiende violadores".

Pareciera ser que algunas conductas previstas en el Código Penal resultan "nobles" o "dignas de ser defendidas" y otras no. Pareciera ser también que el Estado de derecho y las garantías constitucionales rigen en algunos casos y no en otros. ¿Y quién es el encargado de trazar la línea divisoria entre ambos supuestos? El Consejo Superior de la UNC.

Para tranquilidad de algunos penalistas, con el criterio del Consejo Superior se puede acceder a la docencia en esa universidad aunque se haya defendido a homicidas, a ladrones de guante blanco, a extorsionadores, a narcotraficantes, a vendedores de droga en la puerta de las escuelas, a secuestradores que asesinan a sus víctimas pese a haber cobrado el rescate o que les cortan los dedos para enviarlos como "prueba de vida", etcétera, etcétera. Todos ellos tendrán buena acogida en el claustro docente de la UNC. Claro, para todos esos imputados rige el principio de inocencia, se aplican las garantías del debido proceso y pueden contar con un abogado que vele por sus derechos sin que tal circunstancia empañe su currículum.

Pero si se acusa a alguien de algún delito contra la integridad sexual, al "imputado" automáticamente se le pone el mote de "violador" y a quien se anime a defenderlo se lo considera poco menos que "cómplice" de esa conducta. Acá no rige el Estado de derecho. Acá no importa si hay pruebas. De nada vale el ejercicio del derecho de defensa. El "violador", a la cárcel. Y el abogado que cometió la osadía de defenderlo, al escarnio público.

Uno puede entender este singular criterio si es sostenido por algún grupúsculo de alumnos de los primeros grados de la escuela primaria que todavía no ha tenido acceso al estudio de nuestras normas constitucionales, desde nuestro Preámbulo, que habla de "afianzar la justicia", pasando por el artículo 18, que habla de las garantías del debido proceso, del principio de inocencia o de las normas que regulan la actividad profesional.

Pero cuando este temperamento es expuesto -y aprobado- en el seno del Consejo Superior de una universidad, que es precisamente el ámbito donde -creo- se enseñan esas normas, la situación se complica.

Uno de mis orgullos más preciados es considerarme amigo de Oscar Pandolfi. No puedo menos que solidarizarme con él ante este atropello -no a Pandolfi sino a las instituciones- cometido, aunque cueste creerlo, por el Consejo Superior de una universidad estatal que se precia de su calidad académica.

"Cosas vederes, Sancho, que non crederes".

Marcelo Inaudi

DNI 12.811.645

Neuquén

La desgracia tocó a mi puerta dos veces en tres años: primero falleció mi padre y hace sólo unos días, también mi madre.

El viejo, después de trabajar durante toda su vida, criar y alimentar a tres hijos, dejó este mundo por culpa de una enfermedad jodida si las hay; era diabético. Pero se ocupó en vida de tener sus aportes al día, como exige la ley, para dejarle un ingreso mensual a su esposa, mi mamá. Resulta que desde que él falleció mi madre insistió en los trámites legales para cobrar el dinero que le correspondía, pero nuestra burocracia se lo impedía. En ese momento la AFJP Orígenes, empresa a la cual mi padre había hecho sus aportes, le exigía trámites interminables para poder concluir con sus papeles. A todo esto pasó un año y medio y mamá, sin su plata.

De repente a nuestra presidenta se le ocurre pasar la plata de las jubilaciones al Estado para poder negociar todo ese dinero en proyectos turbios a los que ya nos tienen acostumbrados todos nuestros gobernantes, cosa que todo el mundo sabe pero ante la cual nadie hace ni dice nada.

Después de que sus hijos y familia la ayudáramos económicamente durante dos años, cosa que haríamos de nuevo mil veces más, una neumonía no diagnosticada -negligentemente, en una clínica privada de Cipolletti- nos hace despedir al único ángel vivo sobre la tierra, mi vieja. Falleció el domingo 22 de marzo al mediodía, a los 58 años; el lunes 23 entró al sistema de la Anses como fallecida y el martes 24 salió resuelta su pensión. ¿Casualidad? Yo en este país no creo más en nadie.

Solamente mi madre podría haber cobrado ese dinero, que estaba destinado a sumar juguetes y recuerdos lindos a su nieto Facundo.

Ojalá la primera víctima fatal del tren bala sea algún político corrupto o algún burócrata que trabaje en el Estado: eso pide mi bronca, pero mi corazón pide que Dios le dé la paz que está sintiendo mi madre en estos momentos, porque está orgullosa y sabe quiénes son sus hijos. Tiene claro que no son harapientos peleando a toda costa por un poco de poder que de alguna u otra manera cuando venga la muerte no va a servirles de nada? hasta la parca va a vomitar cuando los venga a buscar.

Fernando Sosa, DNI 23.856.282 - Cipolletti

Como director de un medio especializado en turismo, estoy habituado a visitar terminales aéreas y terrestres y a describir -calificando- a los diversos prestadores.

En las aéreas ya me resigné a pagar cafés y estacionamientos mucho más caros que los de la ciudad a las que sirven esas terminales. Podríamos aceptar que se trata de lugares alejados de los proveedores y que suelen pagar concesiones elevadas, lo que encarece sus prestaciones. En el aeropuerto de Bariloche -que me tocó transitar hace unas semanas- por estacionar cobraban $ 4 (casi un euro) la hora y por el café"cito", $ 8 (más de dos dólares).

Sin embargo tuve que estacionarme bajo un sol rajante. Aceptar un café livianito, frío y sin espuma por lo lento del servicio (pese a que la cafetería estaba semivacía), tomado de apuro junto a un ventanal con el marco sucio y mal pintado y frente a un cristal opacado por una suciedad que se reflejaba -provocativa- en el límpido cielo barilochense. Yo no criticaré los precios. Éstos se forman con costos que tampoco son bajos y con un socio/Estado que cobra caro y que no devuelve mucho. Pero me pregunto si el prestador no hace lo mismo que nuestro Estado: cobrar como primera pero contraprestando de segunda (y a veces de tercera).

Estas razones nos están colocando, con cifras que ya se reflejaron en las últimas dos temporadas, fuera de competencia en lo tarifario respecto de los vecinos. Y observamos cifras de arribos nacionales e internacionales -aun las oficiales- que ya muestran la caída, y eso desde bien antes de la crisis internacional. Pero lo lamentable no son las tarifas elevadas; eso es algo inmanejable para los prestadores. Los destinos mundiales más exitosos -Francia y España, por nombrar los que lideran el ranking- no son precisamente de los baratos.

Lo grave de nuestro caso es que a la falta de calidad en la prestación se agregan las malas actitudes de los que "despachan", un mundo sin cariño por su trabajo, sin vocación de hospitalidad, sin formación profesional, con empresarios improvisados. Y en un mercado muy competitivo en el que el cliente ya tiene otras opciones, más baratas o de mejor calidad, por el dinero que paga.

Cuando -esperemos que no suceda- en pocos meses los empresarios empiecen a hablar de declarar la emergencia turística argumentarán cuestiones macroeconómicas o climatológicas, olvidando las relativas a la distorsión calidad/precio.

Eduardo Detang, DNI 7.629.203 - San Martín de los Andes