Fiel a su costumbre, el gobernador Miguel Saiz siguió el oficio religioso afuera del Polideportivo. "Todos ansiábamos la beatificación de Ceferino y ésta es una fecha muy especial, porque es la primera luego de la jornada de noviembre y se confirmó el poder de convocatoria que tiene", dijo.
Sobre el traslado de los restos, opinó que "tuvo mucho que ver la familia pero independientemente de ello ésta es la localidad que nació y su fe y esperanza sus fieles la vendrán a renovar aquí. La posición de la Iglesia es la correcta. Soy un devoto de Ceferino desde siempre y llevo conmigo una imagen que me acompaña". (AVM)