NEUQUÉN (AN) - La Casa de Gobierno ayer por la mañana quedó desierta. Y con los muros repletos de consignas contra el anterior y el actual gobierno. Cuando pasó la marcha con aerosoles pintaron en las paredes, a Sobisch lo acusaron de "asesino" a Sobisch y a Sapag de ser su "cómplice".
Al actual gobernador le demandaron que "no te hagas el distraído".
Es que una parte importante de los manifestantes, al menos los que pertenecen a los gremios opositores, le reclaman que para un "cambio" como el que profesa, debe romper del todo con el anterior gobierno. Y le piden una postura más crítica en torno al caso del docente asesinado.
Sapag decretó esta semana un asueto a los docentes y dijo que la de Fuentealba fue una "muerte injusta y violenta que nunca debió haber ocurrido".
Frente de la gobernación fue colocada un enorme manto rojo de papel con los rostros de los casos más emblemáticos entre quienes murieron por balas policiales. Era impactante por su dimensión, cerca de 100 metros, y por los rostros de los que no están. Entre ellos Fuentealba. Lo colocaron sobre la vereda de la plaza Roca,
frente a la fachada sur de la Gobernación.
No hubo presencia policial. Sí se vio algunos efectivos de la dirección de Tránsito
La otra instalación fue en el monumento al general San Martín. La estructura que lo sostiene quedó teñida de negro y con figuras que simularon delantales blancos. También colocaron decenas de remeras sostenidas a la manera de un pasacalles, con las leyendas "Carlos Presente" y su rostro.