CATRIEL (ACA)- Como sucede cada vez que llueve, tanto los barrios como las calles céntricas de esta ciudad fueron una tortura para peatones y automovilistas. En Roca y Cacique Catriel desde hace años reclaman por que se forma una gran laguna y el agua cubre de cordón a cordón impidiendo salir de las casas según los vecinos. En el resto de la ciudad las calles estaban virtualmente imposibles de transitar a pie por la gran cantidad de lodo el que -por declive- se traslada a la calle principal, San Martín.
La mayoría de las calles de la localidad no tienen asfalto, y son de un material que en contacto con el agua, producen un lodo que hace difícil moverse a pie, aunque para quienes disponen de vehículo las cosas no son mejores. A medida que la lluvia se prolonga, comienza a ceder el terreno y se producen profundos baches que atentan contra la mecánica de los rodados menores. Los taxistas se niegan a llegar a algunos sectores, hecho que complica más aún poder cumplir con las obligaciones cotidianas.
Las calles de asfalto no ofrecen muchos más beneficios que las que no lo tienen. La avenida San Martín es un río de agua, producto del escurrimiento de los lugares más altos. Tanto las ruedas de los autos como el propio drenaje, traen el barro de las otras calles, lo que hace que un torrente amarronado gane calles y veredas.
En Roca y Cacique Catriel, vecinos del lugar manifestaron que desde hace años reclaman una obra que los libere de la "laguna obligatoria" que se forma cada vez que llueve.