El temporal de lluvia y granizo agravó el crítico cuadro que viven cientos de vecinos de Neuquén capital y elevó a 64 los evacuados y autoevacuados; a la vez que los inconvenientes se ampliaron a otros sectores de la ciudad. Por caso, hubo aluviones de barro, techos caídos y terraplenes que cedieron al agua.

La situación es muy preocupante en la zona de Plottier donde diez familias (unas 30 personas) que viven junto al río Limay debieron dejar sus casas inundadas. A este problema tuvieron que sumar la falta de provisión eléctrica. Es que ante el riesgo de electrocución, la cooperativa de Plottier cortó el servicio.

Ayer a la noche y ante el colapso de un puente, unas 70 familias que viven en un barrio residencial en la zona de La Herradura quedaron del otro lado del canal. Al cierre de esta edición esperaban la colocación de un nuevo puente.

Del total de evacuados y autoevacuados, 53 son vecinos ribereños y once los integrantes de una familia de Ciudad Industrial, a quienes se le desmoronó el techo de su casa como consecuencia del temporal. Con todo, el barrio más afectado por la lluvia fue Confluencia, por el desborde del arroyo Villa María, que llevó hasta un metro de agua dentro de las casas.

"Necesitamos botas para poder caminar en el agua, tenemos los pies helados porque la ropa y todo el calzado están mojados", reclamó ayer Gustavo Baeza, un vecino del paraje Isla Verde ayer por la tarde cuando era evacuado. Lo llevaban junto a Cecilia Salgado, una vecina de 67 que debió dejar su casa inundada.

El ministerio de Acción Social distribuyó colchones y frazadas, pero así como Baeza los vecinos necesitan botas de goma para agua. Muchos de ellos llevan más de dos semanas con agua en la puerta. En esos lugares, el agua del río se une a los líquidos putrefactos de lagunas y arroyos, transformando el escenario en un peligro foco de infección. Alrededor de las 21, el municipio neuquino informó que del total de los evacuados, 42 son menores y 22 mayores. A lo largo de una jornada complicada, la dirección de Defensa Civil recibió un total de 92 reclamos.

En el marco del complejo panorama, personal de Defensa Civil tuvo que atender a vecinos que viven en un sector aluvional del barrio Cordón Colón. Allí, una corriente de barro ingresó en varias viviendas que debieron ser abandonadas.

Eduardo Royano, director de Defensa Civil del municipio, indicó ayer que, sumadas a las personas que habían dejado sus viviendas en los días previos, "tenemos 64 personas entre evacuadas y autoevacuadas".

La capital neuquina registró ayer las consecuencias de un chaparrón de lluvia con granizo que sumaron14 milímetros de agua.

La lluvia provocó filtraciones y roturas de las obras de contención del arroyo Villa María, que terminó desbordándose. Esta inundación afectó principalmente a las viviendas ubicadas sobre la calle Pomona. También quedaron cubiertas de agua las calles Paimún, Tres Arroyos y Boerr.

Otro punto conflictivo fue la intersección de Saturnino Torres y Lamarque, donde se acumuló hasta un metro de agua dentro de las casas, dañando los muebles y pertenencias de sus propietarios.

En el oeste de la ciudad, la complicación más importante fue la inundación de la calle Belgrano, principalmente en el tramo que va desde Violeta Parra hasta Reconquista. Los operarios municipales debieron cortar el tránsito sobre esta arteria, debido a que, con el paso de los vehículos, el agua acumulada ingresó a las casas. (AN)