El orgasmo puede viajar en silla de ruedas, mas se requiere de conciencia y reeducación. Personas con discapacidad narran sus experiencias más íntimas para sensibilizar a la sociedad sobre su derecho al placer sexual.
Su primer orgasmo no lo disfrutó sino hasta los 42 años. Guiselle –desde pequeña, al tanto de su discapacidad física– pensó que nunca iba a encontrar a alguien que quisiera compartir la cama con ella.
Fuente: HF Noticias