A pesar de la crisis, los vehículos de ensueño no faltan en el Salón del Automóvil de Detroit. Corvette, Bentley, Maserati, Ferrari, Lincoln, Cadillac... la mayoría de las grandes marcan están presentes. Audi presenta un nuevo prototipo de e-Tron, el segundo de esta familia de vehículos eléctricos de lujo. Dotado de una autonomía de 250 km, puede llegar a los 100 km/hora en menos de seis segundos. Este coche de dos plazas tiene una línea deportiva gris con mandos metálicos y neumáticos Pirelli especialmente diseñados. El interior es futurista y minimalista a la vez, con asientos de cuero beige y metal, y volante cuadrado inspirado en la fórmula 1.
Tesla, fabricante de vehículos eléctricos deportivos, amplía su gama con un modelo más "familiar", el Modelo S. Vendido a partir de 49.000 dólares, comenzará a ser producido en 2011.
Para Bentley la recuperación ya llegó: "tenemos reservas de Mulsanne (una camioneta talla XXL vendida en cerca de 200.000 dólares) para varios años, cuando el vehículo aún no está oficialmente en venta", explica el constructor británico.
En Cadillac, el prototipo XTS Plantinum pretende ser "el cinco puertas de lujo del futuro".
La japonesa Honda también presentó un coche de lujo híbrido, la coupé deportiva CR-Z, que se venderá en Estados Unidos a partir del próximo verano boreal. Con un motor clásico, el Mercedes E-Class Cabriolet SLS AMB es "un coche deportivo puro", cuyas puertas se abren verticalmente, con asientos forrados de cuero fino, con un motor que llega a los 317 km/hora. Costará 200.000 dólares.