NUEVA YORK (AP).- Desde las elecciones del 4 de noviembre, los inversionistas han abandonado las acciones a un ritmo que según los analistas resalta su ansiedad ante la perspectiva de una larga y profunda recesión. Incluso con la tardía carrera alcista del viernes, el índice de 500 acciones del Standard & Poor ha bajado un 20% desde el 4 de noviembre, lo que eliminó con creces el repunte del 18% obtenido en las seis sesiones contratadoras que precedieron a los comicios, bajado en el optimismo desatado en ese momento por la posible victoria de Barack Obama.
Los analistas no culpan a Obama por las convulsiones postelectorales. En lugar de ello, las atribuyen al creciente temor de que el gobierno del presidente George W. Bush y el Congreso han manejado con torpeza el plan de rescate de 700.000 millones de dólares y al impacto de la deteriorada economía en las acciones financieras, ilustrado por la caída de las acciones de Citigroup Inc. a menos de 4 dólares.
"Casi es posible escuchar a la gente que grita ´liquídenme a cualquier precio´´´, comentó Al Goodman, estratega de mercadeo de la firma Wachovia Securities.
"Es el mayor miedo y depresión que he visto en mis 45 años de estudioso del mercado bursátil´´. Los especialistas bursátiles hablan de "crash´´ bursátil cuando los valores pierden un 20% en un solo día o en varios.
En las ocho jornadas contratadoras que concluyeron el 22 de octubre, el Dow ha perdido el 22%. Este mes, el promedio de 500 acciones del Standard & Poor perdió más del 25% en las 12 jornadas contratadoras tras las elecciones antes del repunte del viernes redujo esa hemorragia al 20%. En total, los valores bursátiles han perdido 2,6 billones de dólares desde el 4 de noviembre.
El anuncio el viernes por la tarde sobre la designación de Timothy Geithner para como nuevo secretario del Tesoro desató una carrera alcista que elevó en caso 500 puntos el promedio industrial del Dow Jones. Geithner trabajó estrechamente este año con el secretario del Tesoro Henry Paulson y el presidente de la Reserva Federal Ben Bernanke.