NEUQUEN (AN)- El malestar en los cuadros inferiores de la policía se potenció con la muerte del sargento ayudante Gabriel Jara. En el velatorio realizado ayer, uno de los temas de conversación fue "la desprotección" que padece el personal que realiza trabajos en la calle y el "disgusto" por el uso político que el gobierno provincial pretendió darle al crimen.
Varios policías consultados por "Río Negro" revelaron que entre el personal de menor jerarquía se percibe que los jefes "no brindan la protección suficiente a los agentes que salen a la calle". Indicaron que se traduce en la falta de equipamiento -Jara no llevaba chaleco antibalas-, de capacitación, y en la recarga horaria que es "una constante".
También trasmitieron su disgusto porque en una conferencia de prensa ofrecida horas después del asesinato, el ministro Jorge Lara aprovechó la ocasión para retomar la disputa del gobierno provincial con el nacional por la cárcel de Senillosa. "No era el momento, tenía que hablar de nosotros, los policías, y no de sus problemas políticos", indicaron.
En paralelo, ayer circuló por correo electrónico una proclama anónima de supuestos suboficiales con una larga lista de reclamos. "Río Negro" consultó a algunos jefes, que indicaron: "no sabemos quiénes son, pero es cierto que las cosas que dice (el mail) se comentan entre el personal".
En el correo electrónico se señala que "la crítica situación por la que atraviesa la Policía se agrava día a día", por lo que "un grupo cada vez más numeroso" de suboficiales "estuvimos reunidos analizando de qué forma" encarar los reclamos. Serían 25 policías de 12 comisarías.
Añade en otro párrafo: "Sr. gobernador Sobisch, que ha premiado a la eficiente ex ministra de Seguridad Susana Arévalo, nos dirigimos a Ud., el mismo que quiere ser presidente de la Nación, y al jefe de Policía Figueroa, queremos que sepan públicamente que reclamamos un horario de trabajo más justo, que pedimos condiciones laborales más dignas, que no tenemos por qué andar pagando de nuestros bolsillos las balas y los chalecos antibalas que utilizamos, que cada vez que queremos hacer adicionales tenemos que andar arrastrándonos detrás de algún superior, que cuando logramos hacer adicionales los cobramos 2 o 3 meses después. Terminen con la esclavitud policial".