NEUQUEN (AN).- Una casa que fue escenario de la fuga de los delincuentes que asesinaron al policía Gabriel Jara fue baleada ayer a la madrugada con una escopeta de grueso calibre, y los investigadores no descartan la posibilidad de que ambos hechos estén vinculados.
El ataque ocurrió a las 6.30 en Calendaria al 1.700, en el barrio Don Bosco. Las fuentes policiales consultadas por "Río Negro" indicaron que la puerta principal y una ventana del frente recibieron dos impactos que serían de una escopeta calibre 12. En el interior dormían una mujer de 45 años y una nieta, quienes no sufrieron lesiones.
Por el patio de esa casa pasaron huyendo Barrientos y Martínez, pero no se sabe si intentaron refugiarse allí.