El dirigente Luis D'Elía cuestionó ayer con dureza la convocatoria de Juan Carlos Blumberg al asegurar que quiere "impunidad" en lugar de seguridad, pero su acto sufrió la ausencia del Premio Nobel Adolfo Pérez Esquivel, quien a último momento decidió no participar de la contramarcha en el Obelisco porque era "un acto político".
El acto que D'Elía convocó para defender al gobierno de Néstor Kirchner tuvo una modesta concurrencia.
También con discrepancias por el tono del acto, las Madres de Plaza de Mayo decidieron no asistir a la convocatoria del piquetero y ahora funcionario del gobierno nacional.
Pérez Esquivel se indignó ayer al ver el palco y los preparativos que dispuso el Gobierno frene al Obelisco y se retiró de la contramarcha que él mismo había convocado, jurando que jamás se comunicó con D´Elía, quien se "colgó" de su convocatoria.
"Entendemos el metamensaje: pero que sepa la derecha que el futuro de la Argentina no solamente se resuelve con votos. Se resuelve con millones de argentinos en las calles, que vamos a defender, de Ushuaia a La Quiaca el gobierno nacional, popular y tremendamente transformador de Néstor Kirchner", enfatizó D'Elía al hablar durante el acto en rechazo a la marcha convocada por Blumberg en Plaza de Mayo.
Sobre un escenario mirando hacia la Casa Rosada y acompañado por el funcionario bonaerense Emilio Pérsico y el diputado nacional Carlos Kunkel, D'Elía aseguró que "en aquella plaza están marchando aquellos que hoy no quieren seguridad, quieren impunidad para su delitos atroces, varios círculos de militares están marchando detrás de Blumberg".
"Detrás de Blumberg y de su estrategia marchan Bernardo Neustadt, Cecilia Pando, Roberto Durrieu, Mariano Grondona, toda la lacra del proceso", insistió.
La contramarcha sufrió la ausencia de Pérez Esquivel quien decidió realizar su protesta en repudio de la "mano dura" y las "propuestas represivas" que propone el ingeniero, apartado del ex piquetero.
"No estamos dispuesto a aceptarlo", fueron los gritos que se escucharon ayer del Premio Nobel de la Paz al kirchnerista Dante Gullo, cuando vio que le habían montado un palco sobre el que se debía presentar.
Pérez Esquivel se encontraba en la plazoleta central del Obelisco hasta que decidió retirarse, mientras que el piquetero Luis D´Elía debió improvisar un acto y convertirse en el orador principal.
"Para mí la seguridad pasa para que todos los niños puedan tener un plato de comida, le dijo Pérez Esquivel al periodista Jorge Lanata.
"A mí no me consultaron para poner un palco. Nosotros hacemos reclamos de ´no a la violencia, no a la represión´ y nos negamos a que se baje la edad de la imputabilidad; le decimos no al gatillo fácil, no a la represión".
"Son mentiras. Esto lo desmiento total y absolutamente, jamás se comunicó D´Elía conmigo. Ya lo vamos a reclamar después", agregó Pérez Esquivel.
Propuestas
Por el contrario, el titular del Servicio de Paz y Justicia (SERPAJ) dijo que su convocatoria fue para "no a bajar la edad de imputabilidad de los menores porque esto va a en contra de la convención internacional del derecho de los niños y no a la represión" pero, aclaró, nunca llamó a un acto contra Blumberg. (DyN)
