Lunes 24 de diciembre de 2001

MAS INFORMACION:

No hubo reacción de Estados Unidos

Economistas no esperan
sanciones por cesación de pagos

Los pesados números de la deuda

Ver infograma

Rodríguez Saá suspendió el pago de la deuda en su primer anuncio como presidente

 

Negó una devaluación y da curso a una tercera moneda

  Sin precisiones, anunció plan social y austeridad. Se comprometió a hacer "todo por la justicia social".
  El presidente Adolfo Rodríguez Saá negó ayer la posibilidad de devaluar el peso o dolarizar la economía, ratificó la continuidad de la convertibilidad y adelantó que esta semana propondrá la creación de una tercera moneda con el fin de inyectar liquidez al consumo popular.
Esos son los principales lineamientos del plan del nuevo jefe de Estado, quien además prometió -entre otras cosas- la creación de un millón de empleos, indemnización para los comerciantes y civiles víctimas de los saqueos de los últimos días, y un fuerte ajuste del costo político. (Ver infograma)
Durante el acto de asunción, Rodríguez Saá quiso mitigar los efectos de la declaración de "default" y aclaró que la suspensión del pago de la deuda pública se "dialogará adecuadamente" con los acreedores extranjeros para explicar esa decisión porque el país "no repudia" los compromisos contraídos.
El nuevo mandatario aseguró que el dinero ahorrado del pago de estos compromisos se invertirá en "la creación de fuentes de trabajo".
Luego, advirtió que "se va a suspender, simplemente" el pago de la deuda, y adelantó que los organismos de crédito "van a reaccionar bien porque vamos a dialogar con ellos".
En este sentido, se informó que el senador Oscar Lamberto remitió ayer telegramas a los distintos organismos internacionales con la decisión oficial de la suspensión del pago de la deuda.
Por eso, en Estados Unidos no sorprendió la decisión de suspender los pagos de la deuda y no hubo pronunciamientos al respecto. (Ver "No hubo...")
En un improvisado contacto con periodistas luego de su discurso ante la asamblea legislativa, exclamó: "todo por la justicia social".
Durante la asamblea, también postuló que "la deuda externa se ha venido pagando sin el requisito constitucional que dice que es atributo del Congreso arreglar el pago de la deuda interior y exterior de la Nación".
Además, anunció que "todos los libros" concernientes al tratamiento de la deuda externa "están abiertos" para los legisladores. Al respecto, indicó que "todos los dineros que estén previstos en el presupuesto para pagar la deuda, serán utilizados sin dudar y sin excepción en los planes de creación de fuentes de trabajo y de progreso social".
"La deuda externa se ha venido pagando sin el requisito constitucional que dice que es atributo del Congreso arreglar el pago de la deuda interior y exterior de la Nación", estableció.
Dentro de un tono marcadamente declamatorio y sin justificar los anuncios, Adolfo Rodríguez Saá afirmó que no promoverá una devaluación de la moneda nacional porque "sería una nueva quita al bolsillo de los trabajadores".
"Propondremos la implementación de una tercera moneda para inyectar liquidez al consumo popular. Esto llevará beneficio a los trabajadores".
Rodríguez Saá enunció también un vasto plan de austeridad que incluye una rebaja de los salarios de funcionarios públicos a los que puso como límite el sueldo del Presidente de la Nación, con un techo máximo de 3.000 pesos mensuales.
En esa misma línea, sostuvo que se venderán todos los automóviles oficiales utilizados por los funcionarios nacionales.
Al mismo tiempo, el flamante jefe del Estado, expresó que "se venderá todo el parque de aviones del Poder Ejecutivo.
"Invitamos a las provincias y municipios a adherirse a todas estas disposiciones", expresó.
Rodríguez Saá intentó llevar tranquilidad a los estatales al decir que "se congelarán todas las vacantes de la administración pública nacional, de la planta permanente, contratados, transitorios o cualquier tipo de subterfugio para contratar personal, impidiendo toda nueva contratación de personal", para luego agregar que "ningún trabajador de la administración pública nacional perderá su empleo, digo, ningún trabajador, excluye de este concepto a los aprovechados, a los que con lenguaje permisivo llamamos gasto político".
Dentro de las medidas destinadas a la recomposición del tejido social, manifestó que se implementará un plan de ayuda social destinado a las familias más carenciadas y un plan de creación de fuentes de trabajo que será atendido con el ahorro de no pagar la deuda pública.
"Comenzaremos a instrumentar un plan social para crear un millón de empleos en la Argentina", dijo sin precisar en que plazo va a ejecutar ese programa.
(DYN, Reuters y Télam)
     
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación