Lunes 24 de diciembre de 2001

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Negó una devaluación y da curso a una tercera moneda

 

Economistas no esperan sanciones por cesación de pagos

 
  El anuncio hecho ayer por el presidente interino Adolfo Rodríguez Saá, quien indicó que suspenderá los pagos de la deuda externa argentina para destinar esos fondos al plan social que prevé instrumentar, fue evaluado como "positivo y realista" por los economistas Marcelo Lascano, Martín Redrado y Claudio Lozano, que descartaron mayores sanciones por parte de acreedores y organismos multilaterales.
Marcelo Lascano (integrante del Plan Fénix).- Opinó que "guste o no guste, es un planteo realista", porque "se inscribe en la insolvencia externa inherente al modelo caja de conversión, que se fue disimulando con los ingresos provenientes de la venta de activos nacionales y un endeudamiento externo incompatible con la capacidad del país de generar divisas".
El economista dijo que no espera sanciones desde el exterior: "No le temo a la repercusión externa, aunque me preocupa, pero seguramente el incumplimiento argentino está descontado desde hace ya meses por los mercados", expresó.
"La Argentina tiene autoridad moral para negociar porque hasta hace un año, para organismos internacionales, bancos extranjeros y evaluadoras de riesgo, la situación argentina no era afligente sino todo lo contrario", apuntó y consideró que "hubo una corresponsabilidad en el desenlace".
Claudio Lozano (economista de la CTA): Opinó que "es lógico comunicarlo a los acreedores externos e internos, porque Argentina ya estaba en cesación de pagos", pero indicó que "esto requiere apoyo político, y no es el mejor contexto que lo haga un presidente que va a durar 60 días en su cargo".
Dijo que el anuncio debería ir acompañado de "la inmediata caducidad del canje local de (Domingo) Cavallo, la baja de la tasa de interés, la desdolarización de la deuda con el sistema financiero local y la reestatización del sistema de seguridad social".
Respecto de las sanciones, dijo que "no son tan brutales" y que "se pueden manejar si hay un consenso adecuado y se revisan las condiciones actuales de la apertura financiera y comercial", pero alertó que "para eso se requiere un Estado sumamente eficaz para afrontarlo".
"Mi preocupación es que se anuncie esto sin un acuerdo político parlamentario que sostenga esta decisión, y sin una definición de qué se va a hacer", concluyó.
Martín Redrado (jefe de la Fundación Capital).- Prefirió hablar de "moratoria": "Yo no lo llamaría default, técnicamente se trata de una moratoria, porque Argentina no renuncia a cumplir con sus compromisos sino que quiere parar la pelota, generar un plan económico y partir de ese plan generar las condiciones de pago", manifestó. Coincidió con Lascano y Lozano en que "es un paso adelante, y como estaba descontado que no iba a poder cumplir con sus compromisos, viene a sincerar una situación que ya se daba en los hechos".
Redrado tampoco prevé ninguna sanción, sino "un compás de espera por parte de organismos internacionales y acreedores, para esperar a ver cuál es la propuesta de reestructuración argentina y de qué manera va a atacar los problemas productivos", según expresó.
Sobre el respaldo político necesario para llevar a la práctica un anuncio de esta envergadura, el economista destacó que "detrás de este programa está encolumnado todo el peronismo".
     
     
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