"La solución al tema de la migración, que muchos ven como un problema, es aceptarla y hacerla parte de la sociedad". El cónsul en la Patagonia designado hace un año, Juan Carlos Espinoza Quintanilla, asegura que la relación entre los miles de bolivianos que habitan la zona y la comunidad del lugar va mejorando con el tiempo.
Además, reconoce que se han potenciado las posibilidades de comercialización, ya que se formaron pequeños grupos cooperativos que iniciaron sus contactos para vender al Valle Medio, a Neuquén o hasta Comodoro Rivadavia.
El consulado, que se creó el 6 de agosto del año pasado, está trabajando en esa intermediación. Y además aporta ideas para la exportación de productos no tradicionales, como frutas secas, dulces y otros y la importación de vinos producidos en el país de origen.
"Pero ahora la tarea fundamental es avanzar con un censo para determinar con exactitud cuántos bolivianos hay en Argentina. Estamos haciendo con la población del Idevi una intervención fundamentalmente migratoria, para dotar de la documentación necesaria para que les sirva para radicarse en la Argentina", informó en entrevista con este medio Espinoza Quintanilla.
Para eso se requieren tres documentos: el certificado de nacimiento -que lo otorga el consulado-, el de antecedentes de policía -en Bolivia- y el de nacionalidad. "Desde que el consulado está aquí ha ido creciendo el número de radicaciones", continuó afirmando.
La nueva constitución de Bolivia permite el voto migrante, pero requiere del empadronamiento. "Con la cantidad de inmigrantes que hay la votación podría definirse en la Argentina. En cuatro países se estaría votando: en Argentina se da la mayor migración con cerca de 2,5 millones, hay un millón en Brasil, medio millón en Estados Unidos y otro tanto en España", contó el cónsul. La población actual de Bolivia es de 9,1 millones de personas.
Describió que "por naturaleza y hasta por cultura los bolivianos tenemos mucha ligazón a lo que es la tierra. Es una cosa espiritual, por eso de la Pachamama, con rogativas para que las cosechas sean abundantes. El hombre y la mujer bolivianos, son muy adecuados para el trabajo de la tierra y por eso se ha escogido los valles".
El 4 ó 5% son propietarios de origen boliviano, la mayoría arrienda y paga por hectárea según la calidad de la tierra. "Todo está en etapa de construcción, uno de los puntos es el de la propiedad de la tierra. Con lo que ellos pagan, en cuatro años podrían tener una tierra. Entonces se está viendo un acercamiento, un programa de crédito para acompañar la compra", informó el cónsul.