El último en adaptar un relato de Julio Cortázar al cine fue el argentino Diego Sabanés para su ópera prima, "Mentiras piadosas", basada en "La salud de los enfermos". Pero el fascinante y ambiguo universo cortazariano sedujo desde los años ´60 a numerosos directores, entre ellos, leyendas como Michelangelo Antonioni y Jean Luc Godard y el argentino Manuel Antín, el mayor adaptador del escritor a la pantalla grande. Y el primero.
El argentino Antín es el más experimentado adaptador de Cortázar e incluso trabajó para ello codo a codo con el escritor. En 1961 filmó "La cifra impar", basada en el cuento "Cartas de mamá", del libro "Las armas secretas". La película altera la narración cronológica y espacial al estilo "nouvelle vague" y a imitación de la estructura tan propia del mismo Cortázar. Al escritor le gustó la adaptación y autorizó que Antín hiciera otras.
En 1963 el director realizó "Circe", sobre un cuento del libro "Bestiario", con Graciela Borges y Sergio Renán en los protagónicos y el mismo Cortázar como dialoguista. Le siguió "Intimidad de los parques" (1964), basada en los cuentos "Continuidad de los parques" y "El ídolo de las Cícladas", filmada en Perú.
A nivel internacional fueron los europeos Antonioni y Godard los que hicieron que Cortázar pasara a los anales de la historia del cine. El italiano trasladó en "Blow Up" (1966) el relato "Las babas del diablo" al "swinging London" de los Beatles con David Hemmings en la piel de un fotógrafo que es testigo de un asesinato y busca esclarecerlo a partir de sus fotos. La película se alzó con la Palma de Oro en el Festival de Cannes y se convirtió en un filme de culto. Godard, en tanto, adaptó en "Weekend" (1967) el cuento "La autopista del sur", del libro "Todos los fuegos el fuego", ambientado en un embotellamiento gigante. (DPA)