NEUQUÉN (AN) - La incorporación de una prueba que había sido pedida por el Centro de Profesionales de Derechos Humanos (Ceprodh), abrió una nueva alternativa en el juicio. Un informe del Ministerio del Interior que se dio a conocer ayer en audiencia privada, reveló que aún tras la reanudación del proceso democrático, los organismos de espionaje del Estado y el Ejército siguieron investigando a las víctimas de la represión, a dirigentes políticos y a miembros de las organizaciones de derechos humanos.

"Se confirma que desde el Ejército, las fuerzas represivas, Inteligencia y en este caso el Ministerio del Interior, se mantiene información secreta de cada una de las víctimas, de dirigentes de derechos humanos como Oscar Ragni y de quienes venimos trabajando en contra de la impunidad", dijo Ivana Dal Bianco, del Ceprodh.

Si bien el fiscal Manuel Balboa adelantó que no alegará en torno a esta prueba porque entiende que no aporta nada nuevo y no tiene relevancia, en tanto a su criterio esa información ya está en la causa, Dal Bianco anticipó que sí alegarán, por lo tanto la audiencia de hoy será privada.

Dal Bianco evaluó que aún cuando algunos defensores habrían dicho que también alegarán, no habría inconveniente para que se continúe luego con la audiencia de réplicas, pautada inicialmente para hoy.

En definitiva quedó planteado el interrogante y recién se resolverá durante la mañana.

La prueba pedida era que los organismos de inteligencia del Estado "remitieran la información secreta que tuvieran, tanto de los imputados, de la situación que se vivía en Neuquén, como de las víctimas", dijo la abogada.

"No nos satisface lo que mandaron, pero demuestra que hay información secreta, que el gobierno sigue manteniendo al día de hoy información de los imputados, y específicamente de las víctimas, archivada", señaló.

Agregó que "esta prueba evidencia que mantienen en secreto la información referente al destino de las víctimas, de los niños apropiados en la dictadura y el nombre de los integrantes del aparato represivo que actuó en los centros de represión. Los siguen ocultando".

En cuanto al contenido del informe -revela información hasta 1997- relató que se refiere "a un seguimiento de inteligencia de las víctimas".