Decididos a aprovechar al máximo las horas del nuevo paro de ocho días, las entidades rurales encabezaron ayer un masivo acto de protesta en la provincia de Chaco, con un tractorazo en el lugar. Los directivos coincidieron en la necesidad de profundizar la lucha desde el "interior profundo" porque, señalaron, allí es donde se siente el mayor impacto de la crisis que atraviesa el campo a causa de las políticas oficiales.
Desde el gobierno, el jefe de gabinete y frustrado negociador, Alberto Fernández, dijo que los agricultores "se volvieron locos" al acusarlos de "haber perdido una oportunidad de dialogar". En cercanías de Néstor Kirchner hubo mayor dureza. Al referirse a los productores en las rutas, se le escuchó decir una frase que define su estilo visceral: "Si quieren, que hagan paro hasta fin de año".
Miles de productores agropecuarios confluyeron ayer hasta la localidad chaqueña de Presidencia Roque Sáenz Peña para realizar una multitudinaria asamblea. Tras una caravana multitudinaria, encabezada por los dirigentes subidos a un tractor, manifestantes de diversas provincias del norte, noreste y centro-este participaron de un multitudinario acto.
Se trató de una demostración de fuerza en un nuevo capítulo de la fuerte puja entre agricultores y el gobierno.
Las concentraciones al costado de las rutas y el bloqueo de los camiones que trasladan mercadería destinada a la exportación continúan en varios puntos de Buenos Aires, La Pampa, Santa Fe, Córdoba, Río Negro y Entre Ríos.
Hoy habrá una asamblea en la localidad bonaerense de Junín, que encabezará el entrerriano Alfredo De Angeli.
En tanto, a la vera de la Ruta 14, en Gualeguaychú, su hermano mellizo, Atilio, anunció ayer poco después del mediodía un nuevo endurecimiento de la protesta en esa vía crucial para la circulación de mercaderías del Mercosur.
En el Alto Valle y Valle Inferior de Río Negro, también hubo movilizaciones en las rutas, sin cortes y con reparto de volantes.
No obstante, el puerto cerealero de Rosario, donde hay acopiadas toneladas de cereales, la actividad fue normal este viernes, dijo una fuente de Servicios Portuarios que administra la terminal.
La puja con el campo se relaciona con la renta del llamado 'oro verde', la soja, que generará este año unos 24.000 millones de dólares, de los cuales el fisco intenta captar unos 11.000 millones por la vía de impuestos, lo que el campo considera confiscatorio.
El gobierno nacional salió a criticar con dureza a los dirigentes rurales. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández aseguró que "se volvieron locos" porque "dijeron que nosotros habíamos dicho que las retenciones eran un error".
Por su parte, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, expresó que "nos parece que este paro es contra el pueblo argentino. Estamos dispuestos a acordar, siempre estuvimos predispuestos al diálogo. No estamos dispuestos a que ese acuerdo lleve implícito un perjuicio para el conjunto de los argentinos".
Fernández afirmó que a la última reunión con el campo el gobierno fue "con una agenda muy generosa donde propusimos hablar de todos los temas que les preocupan, y estaba el tema de las retenciones, y me pidieron que empecemos por ese tema y se hizo, y se volvieron locos, salieron y dijeron que nosotros habíamos dicho que las retenciones eran un error".
(DyN y AFP)