ASUNCIÓN.- El presidente de Paraguay, Nicanor Duarte, dijo ayer que podría renunciar antes de finalizar su mandato el 15 de agosto y ceder su lugar al vicepresidente Francisco Oviedo, para que entregue el poder a Fernando Lugo, electo el domingo.
La posibilidad de renunciar antes de cumplir el mandato "depende de cómo se den los acontecimientos y de cómo quede finalmente la correlación de fuerzas en la Cámara de Senadores y los acuerdos que puedan darse antes del 1 de julio", dijo Duarte. Ese día deben jurar los 45 senadores electos, de los cuales el partido Colorado oficialista logró
ingresar 17 -por lo cual será mayoría-, con Duarte a la cabeza. Al renunciar a la presidencia, por reglamento Duarte asumirá automáticamente la jefatura de su partido, para el que fue elegido el 18 de enero de 2006 por el 63% de los votos. "Depende de cómo esté de humor", dijo finalmente con ironía, cuando se le insistió si presentaría renuncia para el día del juramento en el Senado.