BUENOS AIRES (ABA).- La decisión del gobierno de desplazar a funcionarios clave del Indec como la responsable de medición, Graciela Bevacqua- y el escandaloso manejo de la difusión del índice de inflación de enero, incrementaron la tensión entre el ministerio de Economía y el organismo. Según supo este diario ayer, incluso se habla de que podría haber más cambios en el organismo oficial a fin de adaptar la entidad a otras metodologías de trabajo.
"Dentro del Indec hay operadores políticos que están adoptando posturas inflexibles y que buscan profundizar el conflicto", señaló un vocero del Ministerio de Economía.
La fuente, muy cercana a la ministra Felisa Miceli, resaltó que el Gobierno no dará marcha atrás con las modificaciones de funcionarios y de metodología que se quiere adoptar y que seguirá evitando manifestarse en el medio del conflicto.
Sin embargo, técnicos del Ministerio de Economía y del Indec aseguraron que la presión por "modificar" las cifras es una constante que viene en aumento y se va a profundizar. "Sabemos que hay apretadas en distintos niveles técnicos. Lo que busca la cúpula del Gobierno es conformar una realidad muy distinta a la que dan los números", reconoció un técnico de Economía.
Ya hubo antecedentes concretos de esta iniciativa. En el transcurso de los últimos 40 días la ministra Miceli desplazó a 12 funcionarios técnicos de Economía y del Indec hasta que la situación se precipitó con el desplazamiento de Bevacqua. "El problema es que la ministra no pone ningún freno a nada. Le indican todo lo que tiene que hacer desde Casa de Gobierno y del Ministerio de Planificación, particularmente a través del secretario de Comercio, Guillermo Moreno", agregó una fuente del Indec.