En el hemisferio norte la mayoría de los rescates en montaña deben pagarse. Para ello los alpinistas y escaladores contratan seguros, los que se hacen cargo de la búsqueda, el rescate y también los eventuales costos médicos.

Los seguros se contratan generalmente por intermedios de los clubes y las federaciones de montaña, que tienen millones de montañeses afiliados. Los seguros son contratados asimismo por las empresas que ofrecen servicios de aventura en montaña y también se pueden contratar en forma particular. El sistema permite que existan equipos de rescate profesionales, que trabajan en su mayoría con helicópteros.

Hay regiones que inclusive tiene leyes que regulan sobre las actividades que se pueden hacer en la montaña. Establecen derechos y sobre todo obligaciones. También penalizan a los montañistas descuidados e inexpertos.

En Italia, las autoridades del Valle d'Aosta implementaron la medida después de estimar que cuatro de cada diez incidentes de emergencia son causados por gente descuidada y mal equipada que se aventura en los Alpes. En la mayoría de los casos las personas con problemas piden auxilio con sus teléfonos celulares.

La ley se puso en vigencia con tres personas que tuvieron que ser rescatadas por los servicios de emergencia al quedar atrapados en la vertiente italiana del Matterhorn, a una altura de 3.835 metros. Después de que un helicóptero, un médico y guías alpinos fueron enviados para bajarlos, se descubrió que los hombres no estaban heridos sino que se sentían demasiado cansados para descender. Cuando se recuperaron, se encontraron con una factura por 3.000 euros.