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Viernes 14 de Julio de 2006
 
Edicion impresa pag. 31 > Policiales y Judiciales
A las chicas les daban marihuana y cocaína
Tras el procesamiento y la prisión preventiva de un sujeto acusado de integrar una red de prostitución infantil que actuaba en Roca, se conocieron más detalles sobre el aberrante caso en el que fueron víctimas chicas de entre 13 y 17 años, y hasta una nena de 10. Les daban drogas y las ofrecían a "clientes" para que tengan relaciones sexuales.
Tras la resolución del magistrado, Alberto Fasanella continuará detenido en la Cárcel de Encausados de Roca.
Tras la resolución del magistrado, Alberto Fasanella continuará detenido en la Cárcel de Encausados de Roca.
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ROCA (AR).- Alberto Fasanella, el propietario de una vivienda que fue allanada el 24 de mayo pasado y que permitió descubrir una sórdida historia de prostitución infantil, fue procesado ayer por el juez Pablo Iribarren, quien además le dictó la prisión preventiva.

Si bien a la copia de la resolución del magistrado no se tuvo acceso por ser las víctimas menores de edad, se conocieron detalles aún más increíble e indignante sobre lo que presuntamente ocurría en la vivienda ubicada en calle Neuquén al 600 de esta ciudad.

Se confirmó lo que había adelantado "Río Negro" en su momento: las chicas, de entre 13 y 17 años, mantenían relaciones sexuales a cambio de comida o monedas.

Pero ayer se conocieron algunas cosas más sobre esta investigación. Por ejemplo, entre el grupo de chicas-nenas que iba a la casa de Fasanella, había una de sólo 10 años.

Las víctimas tienen un denominador en común: provienen de hogares con nula contención, y en algunos casos, los abusos se remontaban a los primeros años de su infancia. Sin duda son nenas que han quemado etapas, y sus años biológicos no se corresponden con las experiencias vividas (ver aparte).

Esto se desprende de la investigación y las declaraciones, ya que varias de las víctimas solían frecuentar locales nocturnos en dónde nada tiene que hacer una chica de esta edad.

Y toda esa falta de afectos y carencias materiales, aparentemente eran aprovechadas por Fasanella y algunas otras personas que aún no fueron identificadas. Así lo ratifican los dichos de las chicas, que decían que todo era a cambio de comida o monedas.

Varias de ellas se criaron prácticamente en la calle. Es más, dijeron que cuando llegaba la noche, dormían en cualquier lado. Algunas habrían asegurado que preferían el frío o la intemperie, que volver a sus casas donde podían ser víctimas de abusos y maltratos.

Uno de estos casos es el de una chica de 13 años, quien declaró que había sido violada por su padre, posteriormente por su padrastro y finalmente por su hermano. Lo terrible también es que la madre de la jovencita sabía todo esto, pero nunca hizo la denuncia.

Las pruebas contra Fasanella se basan esencialmente, aunque no únicamente, en los testimonios de las menores. Y si bien los dichos por sí solos pueden ser considerados una prueba endeble, al ser varias las declaraciones coincidentes, este indicio adquiere una fuerza importante.

Por otra parte, las fotos de alto

contenido erótico en las que aparecían menores, y que fueron encontradas en la casa de Fasanella, no son sólo una prueba importante también, sino que se transformaron en el disparador de esta investigación.

Cabe recordar, que la policía llegó a la vivienda en busca de una chica de 13 años que se había ausentado hacía cuatro días de su casa. Cuando se hizo el procedimiento, la menor no se encontraba en el lugar,pero las fotos más otros detalles sospechosos como ositos y muñecos de peluche colgados del techo y sobre una cama matrimonial, acrecentaron las sospechas de que algo raro podría estar sucediendo en el lugar.

Con el correr de los días, esas presunciones se fueron transformando en confirmaciones, y a medida que las chicas se animaron a declarar, la situación de Fasanella se empezó a comprometer cada vez más.

El ahora procesado seguramente se dio cuenta de lo complicado que estaba, ya que una de las menores declaró ante la justicia que estando en una confitería de esta ciudad, Fasanella le preguntó si ya había declarado. Cuando la menor le dijo que no, aseguró que el acusado le dijo "ojo con lo que vas a declarar, porque si no, te doy vuelta".

Alberto Fasanella fue procesado por promoción a la corrupción de menores de 18 años reiterada en dos oportunidades en concurso real, con promoción de la corrupción de menores de 13 años reiterada en cinco oportunidades, con facilitación de prostitución de menores de 18 años con acceso carnal reiterado en una oportunidad, con producción de imágenes pornográficas de menores de 18 años, y coacción (amenazas).

Desde el 28 de junio pasado, Fasanella se encuentra detenido en la alcaidía de esta ciudad.

 
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