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Después del paro: La trama secreta del jueves violento

Afirman que un manifestante no aparece desde el jueves

Se trata de un empleado del Castro Rendón. La Policía confía en que estaría en Río Negro.

NEUQUEN (AN).- Desde los hechos de violencia ocurridos el jueves, Ricardo Meriño, un empleado del Hospital Regional Eduardo Castro Rendón, no volvió a ser visto por sus compañeros, familiares y amigos.
Ayer, representantes de los trabajadores y de los profesionales de la salud pública neuquina denunciaron la desaparición de Meriño, a quien se lo vio por última vez en la marcha de los estatales.
El jefe de la fuerza de seguridad provincial, Juan Carlos Lezcano, confirmó que efectivos de la comisaría 21 del barrio Melipal investigaban una denuncia de la familia de Meriño que figuraba como "extraviado" en los registros policiales e indicó que la investigación avanzaba anoche y se enviaron comisiones policiales a Río Negro (ver recuadro aparte).
Meriño, de 39 años y con cuatro hijos, nunca regresó a casa después de la violenta jornada. Hay mucha preocupación por su ausencia porque no se lo encuentra en ninguna comisaría, hospital ni clínica de la ciudad.
El comisario Lezcano, consultado por este diario, reconoció la existencia de la denuncia familiar y rechazó de manera terminante que la Policía haya ejecutado operativos de control en barrios de la ciudad, como se difundió ayer por un programa político de la televisión local. Aseguró desconocer "la procedencia de la versión".
La desaparición del trabajador fue denunciada ayer en la conferencia de prensa efectuada por los delegados de la rama Salud de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), quienes dieron su versión sobre los incidentes en el hospital Castro Rendón.
Echaron la culpa al gobierno y en especial reclamaron la renuncia al ministro de Gobierno y Justicia, Jorge Gorosito, "por no haber frenado la represión y haber arriesgado la salud de los pacientes". Fuentes vinculadas con parte de la dirigencia empresarial también indicaron que los desbordes del jueves "no pudieron ser contenidos" por la fuerza pública, y en consecuencia la responsabilidad "le cabe a Gorosito" en su carácter de titular de la cartera política (ver página 18).
"Si todavía recuerda el juramento hipocrático que (Gorosito) hizo cuando se recibió de médico debería dimitir inmediatamente porque arriesgó la vida de los enfermos y de mucha gente", sostuvieron los dirigentes sindicales. El actual ministro político también trabajó en el establecimiento cuando ejercía como médico.
Observaron que "se nos quiere hacer pasar como violentos, terroristas y subversivos, con toda la connotación negativa que tienen esas palabras en la sociedad", en alusión a la intensa difusión televisiva y radial del gobierno, y las declaraciones de sus principales voceros que ayer también recorrieron los programas políticos de las emisoras locales.
Sin embargo, los sindicalistas advirtieron que no bajarán los brazos y mantendrán el paro en reclamo del pago de los salarios, por la no rebaja del presupuesto sanitario y de los insumos hospitalarios. El lunes realizarán una nueva asamblea.
Dijeron que la policía los empujó al hospital, donde creían encontrar refugio contra la "golpiza, los gases y las balas de goma" que llovían sobre ellos. "Pensamos que no se atreverían a reprimir dentro y sin embargo tiraron gases lacrimógenos, sin importarles absolutamente nada".
La situación vivida puertas adentro del nosocomio "fue de pánico, terror" pues "no se retiraban pese a que pedíamos que liberasen el edificio para que pudiera irse la gente. La respuesta del ministro Gorosito fue que la situación estaba desbordada y fuera de control", denunció la mesa de Salud.
En la mesa hablaron los delegados Baltazar Alvarez, Juan Larrat (rama Salud), Roberto D`Angelo (asociación profesionales) y Juan Castillo (junta interna).
La marcha contra el pago de sueldos y aguinaldos con la tercera moneda aceptada por decreto de necesidad y urgencia del gobernador Jorge Sobisch, los Lecop, pasó a conocerse en Neuquén como el "jueves negro".
Los delegados también cargaron contra el director del Hospital José Russo y lo acusaron de "mentir" porque "no hubo robo de computadoras y el famoso equipo de rayos supuestamente dañado estuvo meses tirado en el patio a la intemperie".
Acerca de Meriño, el empleado desaparecido, Castillo dijo que él lo vio en la manifestación.
La madre y la hermana expresaron su desesperación, antes de conocer la información policial que indicaba que Meriño habría ido a la provincia de Río Negro.

La Policía rionegrina colaboró en el caso

NEUQUEN (AN).- Anoche una comisión policial partió desde esta capital a El Manzano, Río Negro, para averiguar si Ricardo Meriño se encontraba en esa localidad. El comisario Juan Carlos Lezcano reconoció que el viernes se realizó una exposición policial y ayer se formalizó una causa judicial por la desaparición de Meriño en el juzgado a cargo de Daniel Geloni.
Lezcano dijo que la investigación estaba a cargo de la comisaría 21 de Melipal y, sobre la base de datos recibidos de la policía rionegrina habían enviado una comisión a esa localidad. Se consideraba que Meriño habría estado con una familia amiga en El Manzano.
Al cierre de esta edición se esperaba la confirmación de la información, y en la fuerza se confiaba en la resolución favorable del caso.
El ministro de Gobierno, Jorge Gorosito, que recibió las críticas de dirigentes sindicales, no estaba ayer en esta capital -se encontraba en zona norte-, y la titular de Seguridad Ciudadana, Alicia Comelli, no respondía en su teléfono celular.
Sin embargo, Lezcano -que había quedado a cargo de dilucidar la situación- desde el principio se expresó con cautela pero a la vez confiado en la resolución positiva del caso, sobre la base de indicios que le traían sus colaboradores inmediatos.
Desde la tarde los investigadores habían desplegado varias líneas de acción para determinar si Meriño había sufrido una especie de choque emocional durante la manifestación que lo obligó a abandonar sus tareas habituales.

Foto: Los representantes gremiales del Hospital Castro Rendón en la conferencia de prensa.