Sábado 02 enero 1999

 

 

Decenas de evacuados por voraz
incendio forestal en Bariloche

El viento empujó el fuego hasta el barrio El Pilar.

Los vecinos se quejaron del accionar de los bomberos.

MAS INFORMACION:


Hacia la noche calmó el viento y mejoraban las perspectivas

Respuesta solidaria frente a la adversidad inesperada

 

SAN CARLOS DE BARILOCHE .- Un incendio forestal que comenzó en un pinar del cerro Ventana entró ayer en los barrios Pilar I y II, ubicados a 10 kilómetros del centro. Ante la mirada desesperada de los vecinos arrasó varias viviendas y obligó a la evacuación de más de 100 familias.

Una temperatura de 23 grados y fuertes vientos con ráfagas que superaban los 80 kilómetros por hora no permitieron el inmediato trabajo de los medios de ataque aéreo, y los esfuerzos encarados por tierra fueron insuficientes frente la magnitud del incendio, de origen intencional.

Los bomberos debieron trabajar inmersos en una muy densa humareda y soportando una lluvia ardiente de tierra y cenizas que arrastradas por el viento cruzaban los caminos y propagaban el fuego.

Personal del Splif, Parques Nacionales, la Brigada Municipal contra Incendios y Bomberos de todos los cuerpos voluntarios de la ciudad luchaban contra las llamas, evacuaban viviendas y enfriaban sectores en riesgo con camiones cisterna.

Se vivieron escenas de pánico, angustia, bronca y tristeza en el barrio Pilar I. El fuego fue avanzando a gran velocidad y subió por los techos a las casas, mientras que los vecinos se negaban a abandonarlas.

De acuerdo a lo que informaron voceros del Splif, el fuego se habría iniciado poco después del mediodía en un sector de la ladera del cerro Ventana que utilizan como polígono de tiro a cielo abierto los socios del Tiro Federal y miembros de instituciones armadas.

Algunos vecinos, sin embargo, reclamaban indignados contra la ineficiencia de los brigadistas y las autoridades, asegurando que el incendio comenzó el 31 por la tarde y no se preocuparon en controlarlo.

El fuerte viento que soplaba en dirección sur-este, ayudado por la sequía que afecta a la región, neutralizó también la eficacia de los medios de ataque terrestres y no permitió el trabajo de helicópteros y aviones dispuestos para el decisivo ataque inicial.

El fuego se habría iniciado en un sector de coirones y otras especies achaparradas, pero estalló en un pinar cercano y se volvió incontrolable.

Las copas de los pinos se abrasaban en pocos segundos y enviaban una enorme bocanada de fuego a varios metros de distancia, en una sucesión dantesca que elevaba al cielo chispas y cenizas que azotaban a los curiosos, subidos a la ruta 258. Para agilizar el operativo y profundizar la seguridad, el Splif dispuso el corte de esta ruta -que une esta ciudad con El Bolsón- y desvió el tránsito por Villa Arelauquen.

Los brigadistas retiraban garrafas y tubos de gas de las viviendas de ambos barrios, aunque también cargaron colchones y muebles en algunos camiones, pertenecientes a las familias que fueron convencidas de la necesidad de evacuar sus domicilios.

Taxistas y automóviles particulares se sumaron a las tareas de evacuación penetrando por el único camino hasta El Pilar II, con riesgo de quedar encerrados entre dos fuegos si el incendio alcanzaba a una forestación de pinos ubicada al Este del barrio.

A las 19 las autoridades reconocían que el incendio estaba descontrolado y basaban sus esperanzas en favorables caprichos del viento, que estaría encaminando las dos lenguas de fuego hacia un pedregal del cerro Ventana y hacia una cantera abandonada, ubicada frente al Pilar I. Mientras analizaban el origen del fuego, las autoridades comunales soportaban la queja de los vecinos que los hacían responsables de la situación.

 

 

HOME | ECONOMIA | POLITICA | DEPORTES | SOCIEDAD | CULTURA