Es un espacio con mucha luz, sobrio y muy actual. Es un ambiente único, sin divisiones interiores con excepción de una columna, que fue la excusa para articular, a través de una biblioteca abierta en ambas caras, los dos usos o sectores necesarios: trabajo de estudio y atención personalizada de clientes.
El trabajo de estudio se organiza en una gran mesa de 4,40 metros por 0,70 de ancho, con todo un lado sobre la pared más larga del ambiente. Tres columnas de apoyo la interceptan, creando así los dos puestos operativos con todo el guardado al alcance de la mano. Estas torres de guardado tienen un cuidado diseño pensado en los elemento que alojan; hay así espacio para CD, revistas y libros, como también estantes acondicionados para recibir resmas de hojas en sus distintas presentaciones. Unificando todo, dos largos estantes que acomodan rollos de vinilo en sus distintas gamas, logrando un espacio cómodo para su stock y guardado y aportando color.
Por detrás se acomoda el tablero de corte, quedando como una isla desde donde se puede trabajar en todo su contorno y como apoyo una biblioteca que aloja los elementos necesarios para esta tarea.
El espacio de recepción de clientes está armado por una mesa de reuniones de 0,90 m de diámetro color amarillo y tres sillas. Dos cuadros con los colores del estudio y un excelente trabajo de fotografía terminan de cerrar la idea.
En cuanto a materiales y colores se optó por laminado melamínico color blanco para todos los planos de apoyo, con excepción de la mesa de reuniones que está pintada en color amarillo para llamar la atención en la entrada a la oficina. Las sillas operativas son de color rojo y las de la mesa de reuniones color gris para no quitarle protagonismo a la mesa. La columna que divide los dos espacios tiene letras impresas en gris con el slogan del estudio.
Más info: www.estudioclr.com.ar