Néstor Confalonieri/Navegante pedestre
“El nombre parece una contradicción porque habla del movimiento del agua y a la vez de la tierra, pero la obra habla de los inmigrantes. La idea es un personaje que sale de la tierra, pero que tiene los pies al revés porque entra en una tierra nueva a la vez. Plantea ese dilema de surgir de la tierra, de nacer y de morir, de dejar algo atrás.
También la forma, dada por el material, el cemento, figura que está en una especie de máquina, que es como llegaron aquí; además no quise dejar atrás que está en la estación de trenes. La pátina que le puse después hace referencia a eso, a la arcilla y la tierra”.
Gustavo cabrera/Ecuestre?
“Había dos opciones: la chatarra o el cemento. Yo trabajé la chatarra. Al elegir nosotros las piezas pudimos desarrollar bien el proyecto. La chatarra tiene esta cuestión de lo constructivo, la sumatoria de elementos.
La obra parte de una imagen que vengo desarrollando hace tiempo que tiene que ver con el elemento lúdico y la fundamentación del arte, o sea, cuál es el sentido del arte hoy. Tomando la interpretación de George Gadamer sobre el sentido antropológico del arte y del concepto de juego, trabajo mucho con lo lúdico, con juguetes”.
Pero además ya que no hay ninguna escultura ecuestre en Roca podría ser esta la primera que, paradójicamente, no tiene jinete. Y finalmente es gracioso que quedó justo mirando el cartel de General Roca como en una actitud de intriga”.
FERNANDO SPAGNUOLO/Alegoría
“Mi obra se vincula con la simbología que tiene a la paloma como símbolo de la paz pero a la vez tiene una contraposición entre la paloma y la jaula donde estaría encerrado el planeta, representado por la esfera. Me gusta jugar con elementos que permitan que el espectador pueda sacar su propia interpretación más allá de la que yo intente representar.
La técnica que usé es la de chapa batida, a una chapa lisa se le va dando la forma a través de golpes, combinada con soldadura”.
LUCAS SEVERINI/Extractor de los recuerdos
“La obra tiene que ver con una serie que yo estaba trabajando de máquinas oníricas. Mi familia siempre estuvo relacionada con las máquinas. Mi bisabuelo vino desde Italia con sus herramientas, mi abuelo trabajó en talleres y mi papá también. Yo empecé a estudiar diseño gráfico en La Plata pero me tuve que volver y empecé a trabajar en un taller metalúrgico y después abrí el mío. Está relacionada con la mecánica y con los recuerdos. Tiene muchas piezas viejas. Cuando presenté el proyecto sabía que iba a tener dos torres hechas con poleas que pueden representar a dos seres, pero iba a estar librado también a los materiales que encontrara. El tractor me vino bien también para representar al Valle. Remite a un Fiat U 25, le decían el Viñatero, y fue uno de los primeros tractores que se usó mucho en el valle. Mucha gente cuando ve la obra me habla de muchos recuerdos”.
HORACIO DÍAZ/ED 332-333 AC
“A simple vista entra en una línea abstracta, geométrica. Es la primera impresión que puede tenerse de la obra. Al momento de concebirla tiene su intención abstracta pero toma la línea y las formas de la naturaleza. La forma básica es que en la naturaleza no existen líneas rectas. A partir de eso es el planteo formal y si se quiere es la parte poética de la obra”.
IGNACIO MORA/El descanso
“En un principio me llevó la cuestión plástica, la figura. Quería que fuera algo apaisado, horizontal, que tuviera relación con el medio, con la llanura que nos rodea. De alguna manera eso fue también lo que dio el color entre marrón y verde de la obra.
Es una mujer acostada, lo cual lo relaciona más a la tierra. Y también como tiene la cabeza apoyada en un brazo está como meditando. Tiene un toque de instrospección lo que confiere la idea del desierto -que es un ambiente que llama a la meditación-.
Pero por otro lado quería que fuese algo firme, sólido, que se banque el clima, el tiempo y el paso de la gente porque está instalada en un espacio público”.