sta cocina pretende ser "el lugar" de la casa. Así la presenta el estudio que la creó, Diana Gradel, Diseño de Interiores.

Cada una de sus cuatro paredes tiene un concepto. Es así que está:

* pared "cocción": armada con un mueble bajo mesada con cajonera, pileta y anafe. La mesada se diseñó en vidrio templado opacado con distintas tonalidades. La alacena superior, muy liviana, con puertas corredizas vidriadas en uno de los colores que se incluyen en la mesada y que incorpora un purificador oculto por el mismo vidrio. Entre ambos muebles hay un espacio en acero inoxidable, que contiene utensilios y otros elementos para cocinar.

* pared "guardado": un gran mueble contenedor alberga heladeras, una cava para vinos, horno, microondas y otros electrodomésticos.

* pared "te-mática": un mueble en melamina madera, donde una grilla contiene cajas y elementos que tienen que ver con el té.

* y la "ciber-pared", donde se destacan dos sillas de escritorios informales y objetos de diseño en madera.

En el centro de la cocina, un mesón increíble, de quebracho natural rústico, con base de acero. Muy buena queda esta combinación.

Una lámpara colgante, junto al mesón, marca el eje central del espacio.

El amoblamiento de Johnson tiene terminaciones brillantes, formas puras y materiales nobles.

En definitiva, una cocina para la distensión, los aromas y los sabores.

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