"En el mundo se está produciendo la crisis estratégico militar más grave desde la salida del ´45. A esto hay que sumarle que nos encontramos frente el liderazgo más débil del mundo desarrollado desde la Segunda Guerra. Y mientras esto no se resuelva estaremos en problemas. Obama es al día de hoy un fenomenal éxito de imagen y comunicación, pero todavía no ha logrado ganar credibilidad con la acción".

"Mientras no se ordene y se genere un liderazgo articulado y firme, será difícil reencauzar la crisis financiera y contener la crisis estratégico militar. La cumbre G20 confirmó esto. Fue un fenomenal éxito de imagen y comunicación para Obama pero, cuando uno mira la agenda de acción, en nada se avanzó".

"En la región, con la Cumbre de las Américas pasó exactamente lo mismo: éxito en la comunicación, fracaso en la acción. Pocas veces he visto en materia política económica que el título de un diario no se corresponda con la información. El título: ´Obama recompuso la relación con América Latina´. Lo real: que por primera vez en esta cumbre no se firma una declaración conjunta de compromiso... un fracaso diplomático. Pero cuidado, Obama mantuvo altísimo su nivel de imagen".

"EE. UU. confirmó que hoy para ellos existen sólo dos países: México y Brasil. Lo demás no existe. México es prioridad, por eso antes de instalarse en Trinidad y Tobago estuvo un día y medio reunido con Felipe Calderón para arreglar temas bilaterales y liberarle fondos del FMI. Del resto que se ocupe Brasil liderando la región".

"Desde el plano económico, nunca una Cumbre de las Américas le salió tan barata a EE. UU. Pese a la crisis internacional, Obama no comprometió un dólar para América Latina. Él sigue manejando el FMI y con eso calmó los ánimos de los presidentes latinoamericanos".

"En la región está claro entonces que EE. UU. otorga el liderazgo a Brasil. También, que Lula quiere este liderazgo pero todavía no está dispuesto a pagar los costos de este privilegio, con lo cual la región sigue a la deriva".

? Argentina preelectoral

"Vamos a suponer que esta conversación no es el 24 de abril (fecha en que se realizó la jornada) sino que fue el 8 de marzo. Y me preguntan: ´¿Qué posibilidad hay de que el gobierno adelante las elecciones legislativas a junio?´. Yo, con toda franqueza, me hubiese equivocado. Hubiese contestado: no veo posibilidades. Mis fundamentos: el 6 de marzo, o sea, antes de ayer para nuestra hipotética conversación, Kirchner cerró el acto de Catamarca con un solo tema: atacar al gobernador radical por haber adelantado las elecciones. Si el ex presidente estaba pensando en adelantar las legislativas nunca hubiese centrado su discurso de antes de ayer en atacar ese punto. El 8 de marzo a la mañana no tenía la menor idea de que iba adelantar las elecciones. Cuatro días después aparece en todos los canales argumentando por qué hay que adelantarlas. ¿En el medio qué pasó? Catamarca".

"Ahora, del 8 de marzo al 8 de abril en la Argentina pasó: la derrota del oficialismo en Catamarca, el adelantamiento de las elecciones legislativas, paro del campo, la muerte de Alfonsín con convocatoria multitudinaria, el lanzamiento de la candidatura de Scioli... ¿qué nos dice esto? Que los tiempos políticos tienen una velocidad fenomenal".

"Hace cuatro días Néstor Kirchner no iba a ser candidato. Hoy todo indica que va a serlo. Para las elecciones faltan 60 días y no hay claras definiciones. Estamos en el proceso político electoral más incierto de la Argentina. Vamos a pensar que esta semana K toma la candidatura pero el 10 de junio las encuestas dicen que el oficialismo en Buenos Aires está 10 puntos abajo del primero. Pregunta: ¿hay elección o no hay elección el 28 de junio? Simples conjeturas, de aquí la incertidumbre. Yo creo que no hay elección".

"Argumentos: es mucho más sencillo suspender la elección que adelantarla. Hay media docena de presentaciones judiciales de la oposición que sostienen que el adelantamiento electoral es inconstitucional. La Justicia Electoral no ha decidido ni sí ni no. Pero si saca una de las presentaciones de la oposición y avala este reclamo la elección se suspende y vuelve a octubre".

"Mire, yo no digo que esto va a pasar, pero uno tiene que estar preparado para pensar que estas cosas pueden pasar. La Justicia Electoral en definitiva decide darle la razón a la oposición".

"Alguien puede decir que si a K le va mal en junio en octubre le va a ir peor. Son cuatro meses que gana el oficialismo, y en cuatro meses en la política argentina puede pasar cualquier cosa. Por eso digo que es el proceso más incierto. De lo que sí no quedan dudas es de que Kirchner sigue siendo el actor principal de estas elecciones, porque es el que crea las situaciones".

"¿Qué va a pasar el 28 de junio? Sabemos que al gobierno le va a ir mal en el interior. En Córdoba y Santa Fe no llega a más del 10% de los votos. Simple: son aquellas en las que peor imagen tiene K. En Santa Fe sólo la lista de Rossi es la que aporta y en Córdoba, la de Vaca Narvaja. Hay peronismo dividido (Schiaretti y Reutemann van contra K), más oposición. Rossi y Vaca Narvaja no sacan más del 10% en este escenario. Las del norte también están complicadas. Chubut va con otro nombre, se aleja del kirchnerismo".

"Hoy lo que sabemos es que el peronismo va dividido en 15 de los 24 distritos y que aproximadamente el oficialismo pierde entre 3 y 5 senadores. No perderá la mayoría formal. Diputados: sabemos que son 129 y se renueva la mitad. El oficialismo renueva 69. Provincia de Buenos Aires: 35 diputados; el oficialismo, 20 diputados. Hoy saca 13 diputados. Córdoba y Santa Fe pierde otro tanto, así como en el resto del interior. Acá sí pierde la mayoría formal".

"En la provincia de Buenos Aires lo que se sabe hasta ahora es que el oficialismo pierde 10 puntos respecto del 2007. Nuestras estadísticas muestran que saca un 35%. Lo que no sabemos es si el gobierno con este 35% gana la elección por 5 puntos o si con este 35% pierde la elección por 5 puntos. Éste es el gran interrogante electoral que falta definir. El 65% no va a votar a K. Pero si los datos de la oposición muestran que Stolbizer saca el 30% y De Narváez saca el 30%, el oficialismo gana por 5 puntos. Si alguno de estos dos saca el 40 y el otro el 20, el gobierno pierde. Hoy están 30-30. Ahora, en 60 días nadie sabe. Puede aparecer el voto útil, es decir que existe una cierta tendencia de votar por aquel que se cree que más peso le puede hacer al oficialismo y entonces muchos de los votos de Stolbizer vayan a De Narváez o viceversa y ahí se llegue al 40-20 que puede derrotar a Kirchner".

"En estos 60 días Kirchner ya decidió dar una batalla a fondo con el campo, enfrentar con dureza al sector empresario colocando su gente en el directorio por la Anses, enfrentarse a fondo con el Grupo Clarín y oponerse a la Iglesia con el tema de la droga. Aquí se observa que la maniobra es traumática para el gobierno. Uno podría pensar que cualquier político a 60 días de las elecciones trataría de ´achicar´ las distancias con sus adversarios dando algunas señales de acercamiento. Pero yo siempre digo: primero, que en la política argentina no siempre ocurre lo lógico. Segunda realidad: con demasiada frecuencia ocurre lo improbable. Kirchner como actor político rompe todas las reglas de la realidad política. Todos son conscientes de que a los enemigos hay que separarlos para poder triunfar sobre ellos. Kirchner va contra esta lógica política. Por eso es tan difícil de prever".

 Argentina poselectoral

"Muchos esperan las elecciones para resolver incertidumbres. Más de una vez escuchamos que hay que esperar al 28 para tomar decisiones. Yo creo que las incertidumbres después del 28 serán mayores. Nos encontraremos con un gobierno más débil políticamente hablando con crisis internacional. Con esto debe convivir K dos años más. Resumiendo este concepto: si este gobierno que hoy es más fuerte que el que viene y con una economía mejor que la viene no pudo esperar a octubre porque no podía gobernar, ¿cómo va a hacer para gobernar con menos poder político y crisis económica? Van a tener que cambiar su actitud política frente a la oposición para buscar nuevos consensos que les permitan gobernar sin grandes trabas. La pregunta es entonces si Kirchner es capaz de cambiar. Yo creo que no".