El primer ministro haitiano, Jean-Max Bellerive, estimó que más de 100.000 personas podrían haber muerto en el peor terremoto que sufrió la isla en 150 años, según declaró hoy a la cadena estadounidense CNN.
El premier indicó de todas formas que la cifra de víctimas podría ser aún más alta. Bellerive dijo que los daños son muy grandes, aunque el aeropuerto de la capital Puerto Príncipe permanece abierto a pesar de los problemas.
Previamente, el presidente de Haití, René Preval, aseguró que el terremoto podría haber causado miles de muertes en el país, según declaró en una entrevista concedida al diario estadounidense "The Miami Herald". Preval dijo que había tenido que caminar sobre cadáveres y escuchar los gritos de las personas que están atrapadas bajos los escombros.
Eso se puede aplicar también al edificio del Parlamento. "El Parlamento se ha derrumbado. Los colegios se han derrumbado. Los hospitales se han derrumbado", dijo el presidente. Hay una serie de colegios con cantidad de gente muerte dentro", añadió. Todos los hospitales están llenos de gente. "Es una catástrofe".
El terremoto del martes, de siete grados en la escala de Richter, tuvo un "impacto devastador" en la capital del país, Puerto Príncipe, dijo el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, mientras que el resto del país "parece que no ha sido afectado".
El terremoto es el más devastador que sacude la región caribeña en 60 años, desde el de ocho grados Richter que dejó 100 muertos en República Dominicana el 4 de agosto de 1946.
Además de la situación de desesperación y caos en que quedaron los sobrevivientes, los daños económicos podrían ser millonarios en Haití, el país más pobre de América, según estiman organizaciones humanitarias.
DPA