SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El parte médico del sanatorio Güemes confirmó el diagnóstico "de muerte cerebral" de Luciana Pérez, la nena de 2 años derivada a Buenos Aires desde el hospital local. La madre de la pequeña, Jessica Ojeda, quien viajó con la niña a la Ciudad de Buenos Aires, informó que le sugirieron "desconectar" a su hija.
Según el parte médico firmado por el subdirector médico del Sanatorio Güemes, Néstor Morgulis, el pronóstico no es positivo. "Luciana Aylén Pérez, paciente de 2 años de edad, derivada desde el hospital de Bariloche con diagnóstico de muerte encefálica, ingresa a la institución el día viernes 08 de enero confirmándose ése mismo día el diagnóstico de muerte cerebral mediante examen clínico-neurológico y EEG realizado por el jefe del servicio de neuropediatría", indicó en su informe el profesional.
De esta manera, la clínica porteña ratificó el diagnóstico que se le dio a la nena en primera instancia en el hospital Ramón Carrillo de esta ciudad, el cual no pudo ser aceptado por los familiares de la pequeña.
Su abuelo, negó ante este diario que se les haya entregado un parte médico desde el Sanatorio Güemes y dijo que está intentando viajar a Buenos Aires para reunirse con su hija. Por su parte la madre de Luciana, Jessica Ojeda, aseguró a "Río Negro" que volverán con la niña a Bariloche. Dijo que los médicos en Buenos Aires recomendaron "desconectarla, pues no está más con los vivos", contó vía telefónica. Sin embargo, admitió que se niega a tomar esta decisión y que todavía tiene esperanzas de ver evolucionar a Luciana. "Me dicen que lo tengo que asumir y que ya la tengo que desconectar", agregó.
Evaluó que esa decisión la va a tomar la familia, en conjunto. Aseguró que ya tendría asegurado otro vuelo sanitario desde Buenos Aires a Bariloche.
La menor, de dos años de edad, estuvo internada durante más de cuarenta días en el hospital Ramón Carrillo mientras la familia buscó por todos los medios que sea trasladada a un centro asistencial de mayor complejidad. Finalmente, con la intervención de los concejales locales y el intendente Marcelo Cascón, desde la provincia de Río Negro se gestionó la derivación de la nena en un avión sanitario a Buenos Aires. Paralelamente se ordenó una interconsulta con el médico neurólogo Marcelo Di Blasi, quien le habría advertido a la familia que "el traslado no mejoraría nada" y que era "una situación poco favorable".