El Gobierno oficializó hoy la remoción de Martín Redrado en la presidencia del Banco Central por su "actitud remisa" a liberar las reservas destinadas al Fondo del Bicentenario y "por incurrir en mala conducta e incumplimiento de los deberes de funcionario público".
Mediante el decreto 18/2010, que lleva la firma de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y todos sus ministros, se justificó la utilización de esta vía para desplazar al funcionario en que el Congreso "se encuentra en pleno receso estival".
Asimismo, se destacó que "las comisiones cuyos presidentes deben integrar la Comisión que debe aconsejar a la Presidenta no se han constituido a la fecha ni elegido sus autoridades ni lo harán conforme es público y notorio hasta el inicio de sus sesiones".
El DNU puntualizó que las reservas no fueron liberadas "por la actitud remisa" de Redrado, "quien públicamente ha manifestado que no la ejecutaría y de hecho parece no tener reparo en omitir, rehusar o retardar el cumplimiento de la norma cuyo cumplimiento le concierne". "Que en ese sentido, el día 6 de enero de 2010 intentó suspender y evitar la reunión de Directorio convocada para el día 7 de enero de 2010, invocando la inexistencia de temas para ser incorporados en el orden del día y 'que el tratamiento de los incluidos en carpeta no reviste el carácter de urgente'", añadió.
Al justificar la medida, consignó que "el artículo 99 inciso 3 de la Constitución de la Nación argentina establece la facultad del Poder Ejecutivo nacional de dictar normas de carácter legislativo en situaciones excepcionales que hicieren imposible seguir los trámites ordinarios". También fustigó el accionar del removido presidente porque "no sólo no cumple sino que intenta evidentemente erigirse en un obstáculo para el cumplimiento de la normativa". "Que, cuando justamente se trata de dar a los acreedores de la República Argentina en particular y a los mercados financieros en general, suficiente certeza sobre la cancelación de los vencimientos del año 2010, quien debe preocuparse por el cumplimiento de las normas, se niega a aplicarlas, y además trata de entorpecer o desconocer la acción del Directorio de la entidad, siendo ello inadmisible", sostuvo el decreto.
Y añadió: "Que tal actitud violenta cualquier sistema y trastoca cualquier orden instaurando una suerte de anarquía, cuando se trata, como bien destaca la Asociación de Bancos Argentinos en su comunicado requirente de la renuncia del funcionario de entender que 'ningún interés, personal o corporativo es superior al interés de la Nación'".
Especificó que "no ejecutar lo que la norma manda, desbaratar o entorpecer el funcionamiento del órgano máximo de la entidad, es decir, su Directorio, constituyen sendos hechos que por su gravedad obligan a proceder a la remoción ante tamaño incumplimiento".
Además, se remarcó que "el citado consejo carece de fuerza vinculante para el Poder Ejecutivo nacional, constituyendo una opinión y como tal un acto de administración o preparatorio de la voluntad de la Administración que no produce efectos jurídicos en forma directa".
El artículo 1º del decreto establece: "Remuévese del cargo de Presidente del Banco Central de la República Argentina al licenciado D. Hernán Martín Pérez Redrado (DNI Nº 14.610.971), por incurrir en mala conducta e incumplimiento de los deberes de funcionario público". "Exceptúase de la aplicación del segundo párrafo del artículo 9º de la Carta Orgánica del Banco Central de la República Argentina aprobada por la Ley Nº 24.144 la remoción dispuesta en artículo 1º del presente, en virtud de las consideraciones más arriba expuestas", dice el artículo 2°.
El artículo 3° ordena "al señor Procurador del Tesoro de la Nación (Esteban Righi) a proceder a presentar la denuncia respectiva ante la autoridad judicial", mientras que el artículo 4° dispone dar cuenta de la resolución a la Comisión Bicameral Permanente del Congreso.
DyN