Un plan para proteger las selvas tropicales del mundo pagando a las naciones pobres con tal fin fue eliminado ayer al no incluirlo los gobernantes mundiales en un acuerdo vinculante. Se atribuye a la quema de bosques con fines agrícolas o crear pastizales para el ganado, así como la extracción de madera el 20% de las emisiones mundiales. Ello representa tanto dióxido de carbono como el emitido por todos los automóviles, camiones, trenes y barcos.
Unos 13 millones de hectáreas (32 millones de acres) de selva son destruidos anualmente -una extensión parecida al tamaño de Inglaterra- y las emisiones generadas son comparables a las de China y Estados Unidos, según la publicación Eliasch Review.
La deforestación con fines madereros, creación de pastizales para el ganado y siembra de cosechas hicieron de Indonesia y Brasil la tercera y cuarta nación del mundo que crean más emisiones de carbono, después de China y Estados Unidos. "No lograr un tratado significa que la destrucción de las selvas continuará ininterrumpida, los derechos de las personas que dependen de los bosques no serán protegidos y las especies en peligro de extinción seguirán ese camino", dijo Stephen Leonard, del Proyecto Australiano Orangután .(AP)