Al hospital de Centenario, infinitas gracias por el apoyo, la ayuda, el amor y la contención que nos brindaron durante el tiempo en que Nicolás Tiznado, nuestro padre, se encontraba internado. Gracias por la calidad humana que encontramos detrás de esos uniformes de médicos, enfermeros y mucamos.
No tenemos palabras para agradecer todo lo que hicieron por nuestro padre mientras estuvo internado, gracias a ustedes él se fue de este mundo más tranquilo y con mucha paz y nosotros estamos convencidos de que está feliz.
Él nos enseñó muchas cosas buenas, entre ellas a ser agradecidos, a luchar por vivir, a ponerle ganas a la vida.
Queremos decirles mil gracias a los doctores Juan Ferrari, Santiago León y Pablo y a todos los enfermeros y mucamos del sector Internación Adultos por su tiempo y por las ganas con las que trabajan día a día y la dedicación que les brindan a sus pacientes.
Hoy nuestro padre y sus hijos y esposa les damos las gracias con esa sonrisa y ese buen humor que hasta el último día les brindó. Sigan así, porque son un ejemplo de amor a la profesión.
P/Luzmila Osores, Carmen, Paola, Marcelo, Jorge y Claudia, Paola Tiznado
"La luchamos, la peleamos y a veces lloramos... feliz día"
A Lala, Jorgito, tantos y tantas? sí, feliz en tu día y en mi día, ya que hoy se conmemora el Día Nacional de la Enfermera.
Soy enfermera de profesión. Digo "de profesión" porque hace 20 años elegí ser enfermera por decisión propia, por convicción. No tuve ninguna frustración y tampoco fue por falta de opciones. Fue así; elegí la profesión y les juro que volvería a elegirla. Me formé en escuelas bajo el paradigma de que las enfermeras llamadas "profesionales" constituíamos una elite que debía "acudir" al cuidado de los más necesitados pero, paradójicamente, cuanto más nos necesitaban más lejos estábamos, porque los elegidos teníamos otros destinos, más "acomodados" por así decirlo, en escritorios abarrotados de planillas de horarios, insumos y otras yerbas.
Nos formábamos para la alta complejidad; ése era nuestro territorio a conquistar, pero para la alta complejidad tecnológica. Algunos no entendíamos para qué, pero había que respetar el "modelo", un modelo engendrado en otros mundos que nos constituía a veces en lo que decía Ramón, un "viejo paciente-impaciente" del hospital Penna de Bahía Blanca que me visitaba en la guardia: "Sos como un gran robot, gorda, te prenden a las 6 y si la batería aguanta le das hasta las 22" y reclamaba cuando le administraba su medicación:
-¿Vos nunca llorás? ¿A vos no te duele? ¿Tenés familia vos? ¿A qué hora te vas?
Me hubiese gustado llorar el día en que él se murió? pero no era muy profesional, me habían dicho.
A veces escucho a colegas quejarse, y no está mal que lo hagan. Algunos esperan la jubilación como el mismísimo cielo o juicio final. Otras veces escucho propuestas nacionales que hablan y argumentan sobre la necesidad de un plan (eso implica plata) de reivindicación de la figura de enfermería, ¡cómo si la necesitáramos! (la reivindicación digo, no la plata).
Señoras y señores, mal llamados "pacientes", personas, existencias humanas, razón de nuestra existencia... ustedes nos conocen. Saben quiénes somos, nos ven todos los días en los distintos momentos de su vida, cuando alguien nace, cuando alguien muere, cuando se enferman, cuando nos piden un consejo. Digan ustedes si no nos conocen... "en la salud como en la enfermedad, en la prosperidad como en la adversidad", como en un matrimonio.
Y no solamente a los inmaculados expositores de nuestros hospitales, refugio muchas veces de nuestras soledades, frustraciones y por qué no alegrías.
Nos encuentran en los centros de salud, en dispensarios o en la casita de los Hornos donde trabaja Miguel; en las escuelas y en las casas de los moribundos que atienden "la Koka" y Araceli (la "Flaca"). Hemos pasado muchas navidades y años nuevos juntos, hemos compartido hasta nuestras intimidades, vergüenzas, malas y buenas noticias. Y nosotros que decimos, que cuidamos y fuimos formados para dar lo mejor, recibimos sin querer -o queriendo- lo mejor de ustedes: el cariño, el respeto, la sonrisa de "medios dientes" comidos por los hidratos... y también algún que otro insulto desprendido de las bocas apremiadas en los momentos difíciles.
La luchamos, la peleamos. A veces lloramos, nos enojamos. Nos constituimos en las "cabas", en las malas de la película, en las "que si no te portás bien la enfermera te va a pinchar". En las amante s clandestinas, en los objetos sensuales o seres asexuados, en los raros, en "vos estás para obedecer", en las que piden silencio. Pero somos también la mano que calma, que acompaña, que sujeta, que despierta, que a veces se traga las lágrimas soportando el dolor de la pérdida (yo ahora aprendí a llorar? ¡y qué bien hace!).
Ahora entiendo lo de la complejidad. La he encontrado. La complejidad no es sólo tecnológica. La complejidad está entramada en lo social. No aparece en las terapias. Por eso y porque nos lo merecemos, digámonos: ¡Feliz día! ¡Y que nos aproveche!
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MIRTA
MUY FELIZ DÍA PERO SOBRE TODO GRACIAS Y ESPERO QUE ALGÚN DÍA RECONOZCAMOS SU TRABAJO ECONÓMICAMENTE Y TAMBIÉN DESDE EL RESPETO Y LA VALORIZACIÓN DE TODOS!!!
PIPISTRELLA
Profesión sacrificada y solidaria si la hay.
Hay que tener mucho coraje y amor para elegir ser enfermero...
Mis saludos en su día!
XXXXXX
Bueno,perdón, creo que escribí mal el apellido del cantante, pero así es mejor, todos saben quién es.EN CUANTO A LOS ENFERMEROS/AS, LOS QUIERO MUCHO, PERO DESDE LEJOS,JA.JA,JA, NO QUISIERA TENER QUE VOLVER A NECESITARLOS, AUNQUE SEGURAMENTE QUE SÍ, LA VIDA PASA POR SUS MANOS, Y TAMBIÉN LA OTRA, QUE PREFIERO NO NOMBRARLA.CON VUESTRO AMOR TODO ES MEJOR.
XXXXXX
FELIZ DIA, ENFERMERAS Y ENFERMEROS, MUY BUENA LA CARTA.CUÁNTAS VECES ME HAN AYUDADO, QUISIERA TENER REGALOS PARA TODAS Y TODOS, PERO DESDE ACÁ LES MANDO MUCHOS BESOS Y LES DESEO QUE TENGAN MUCHAS SATISFACCIONES EN SU TRABAJO, ADEMÁS, POR SUPUESTO , UN BUEN SUELDO.A VECES NUESTRA VIDA DEPENDE DE USTEDES.GRACIAS, TOTALES. CON PERMISO DE CERUTTI
LEIBNIZ
Muy feliz día a las enfermeras! la verdad q es una profesión muy sacrificada, y tenemos mucho q agradecerles!! bye y felicidades!
MANDRAKE
SALUD, BRINDO POR USTEDES , GRACIAS POR TODO
"Mire a su alrededor"
Sr. intendente Farizano, como vecino del barrio Huiliches estoy preocupado por los sucesivos accidentes que han venido ocurriendo en la intersección de las calles Violeta Parra y Pilar; para ser más precisos, a la vuelta de su casa.
¡¿Cómo?! ¿No se enteró? No me diga... lo que pasa es que cuando usted circula por esa zona lo hace en su camioneta (o en la del municipio) hablando por celular. Sí: manejando y hablando por celular... lindo ejemplo, ¿no?
No se preocupe, yo le voy a contar lo que pasa en esta zona en particular. La plazoleta que está frente al Jardín de Infantes Nº 50 tiene doble circulación en ambos lados, no cuenta con veredas, iluminación ni riego -y, por ende, carece de plantas- y los juegos son una vergüenza; es más: en el 2003 gastaron 56.000 pesos (son los cascotes más caros que he visto en mi vida).
A continuación del jardín y por calle Máximo Salcedo llegando a Rufino Ortega está la Escuela Nº 343; es una calle angosta de doble circulación. Usted no se imagina el peligro que corren los chicos, los papás, los maestros... es decir, todos los vecinos en general. No ha pasado una desgracia más grave porque Dios no ha querido. Por eso como vecino de la ciudad de Neuquén y como vecino suyo -porque todo esto ocurre a escasos metros de su casa- le pido que trate de darnos una solución antes de que suceda algo más trágico. Desde ya se lo agradezco y por ahora lo saludo cordialmente.
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PIPISTRELLA
Terrible el estado de todo en mi querida ciudad: plazas, plazoletas, calles, cordones, veredas, perros sueltos...
Todo está roto o descuidado.
Muchos habitantes se encargan de ensuciar o romper, pero amén de la desidia de algunos ¿ciudadanos? este gobierno municipal ( y aclaro que no pertenezco ni simpatizo con ningún partido político) se ha esforzado en hacer absolutamente NADA.
Los que deberían encargarse...viven en otra ciudad o recorren la capital de noche, porque de otro modo no se entiende que las cosas estén cada vez peor.
Ahora que lo pienso mejor....quizá muerdan los ingresos de alguna casa que hace trenes delanteros o cambia amortiguadores...de otro modo es increíble pensar que no ven la rotura de calles y anexos.
Gente: saquen a ventilar las posaderas de sus oficinas y CAMINEN la ciudad, toda!. caminar es bueno para la salud y evita la celulitis estatal!
OSCAR CARLOS
Estimada señora Marta Isabel: Donde en su comentario dice "ciudadanos que le pagan puntualmente sus impuestos" debería decir "que le pagan puntualmente su salario", ¿le parece?
MARTAO
si, señor, asi como nuestra señora presidente no vive en nuestro pais ni entiende el idioma del pueblo, el señor Farizano no pasea, ni ve lo que ocurre en nuestra querida ciudad, no responde las notas de los ciudadanos que le pagan puntualmente sus impuestos como corresponde.y asi estamos...calles sucias, el transito terrorifico, los talleres mecanicos, y de chapa y pintura instalados bajo ninguna regla de seguridad, las calles rotas, obras que hacen años que esperan ser terminadas (Namuncura y San Luis por ej)falta de iluminacion- en fin no nos olvidemos de esto en las proximas elecciones. aunque con mucho arrepentimiento debo decir que yo lo vote!!!!!!!!marta isabel orlando Barrio Nuevo
"Prolongadas y dolorosas ausencias"
Hubo un hecho casi perdido en la nebulosa de los tiempos, ocurrido hace más de 70 años en la zona rural de Villa Regina. Un día cualquiera de la década del 30 fue asesinada a balazos por Bairoletto y su banda la joven madre Ana Sferko, progenitora de quien hace muy pocos días falleció en esa misma ahora ciudad conocida como "La perla del Valle".
Se trata de María "Lala" Nelli Vda. de Piccinini, hija de los primeros pobladores del lugar de donde paradojalmente se cuenta con poca historia, que no vive de leyendas. Pero hete aquí que hasta hace contados días era la aún huella fresca de un terrible crimen cometido por alguien a quien hoy muchos quieren insólitamente reivindicar.
Ha fallecido en Villa Regina Lala Nelli, mujer que sufrió prolongadas y dolorosas ausencias, mujer de temple excepcional que sólo fue doblegada por una cruel y progresiva enfermedad en los últimos años de su vida. Dejó un gran ejemplo a sus hijos Mario, Liliana y Ana María, que seguramente lo trasladarán a sus respectivas descendencias.
Casi sobre los acontecimientos que ameritan festejar un nuevo aniversario de la ciudad se produjo este deceso de alguien que casi involuntariamente y por medio de un hecho luctuoso se transformó en parte de lo acontecido allá lejos y hace tiempo. Esos festejos merecerían llevar un crespón de luto. Para "Lala", un eterno descanso y hacia quienes le suceden, las más sentidas condolencias.
El viernes 13 del corriente, la inusitada presencia de miembros del Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de Centenario (SOEM) en la Radio Municipal Sayhueque nos hizo volver por minutos a los innombrables años de la peor historia de nuestro país.
Nuevamente un grupo de "muchachos" trató de imponer sus ideas mediante acciones de intimidación y de choque, coartando además el derecho a la libre expresión y el derecho a elegir lo que preferimos oír.
¿Hasta cuándo vamos a permitir estos resabios de violencia histórica? ¿Hasta cuándo vamos a dejar que se nos impongan de esta manera los pensamientos?
Es insólito que en estos tiempos en que estamos desligándonos de una ley de radiodifusión producto de la última dictadura aún tengamos que permitir que ciertas personas no entiendan que este tipo de actitudes contra los medios de comunicación (y por tanto de la sociedad en su conjunto) es totalmente inapropiado.
Me gustaría saber qué fue lo que los movilizó a tal atropello, porque sinceramente no encuentro justificación -más allá de que han pasado treinta y tantos días sin que el Ejecutivo atienda sus demandas-.
No es momento de empeorar el conflicto y menos de acudir a la exaltación y el agravio gratuito, sino de encontrar una forma civilizada y democrática que los lleve a la obtención de los objetivos buscados. Y esto no lo dice una persona sola? se los pide a gritos toda la comunidad de Centenario.
