"Es un partido importante, histórico", sonríe Fabio, uno de los tantos cronistas brasileños que fueron enviados por sus medios para cubrir un choque que para algunos periodista de acá (antes del partido) era "goleada o incendio".
El imán que genera un seleccionado como el de Maradona en esta circunstancia, peleando como un gladiador herido por lograr una conquista que parecía ser un derecho adquirido, es demasiado fuerte a nivel mundial. Tomás Guash, el reconocido subjefe del diario deportivo As de España lo entiende y lo vive de esta forma. "Creo que Argentina no puede quedarse afuera, sería como una catástrofe para el fútbol que no esté en el próximo mundial".
Antes del partido, Guash fuma como si Argentina fuese España y Maradona Del Bosque. "Messi debe estar en Sudáfrica y Maradona también, ellos son grandes en todo, en el negocio también".
Ayer en el Monumental estvieron
275 medios medio acreditados de todo el mundo y un total de 1349 personas trabajando directa o indirectamente con la cobertura del choque ante Perú es otra prueba fehaciente de la realidad argentina.