VIEDMA (AV).- Las dificultades financieras de Río Negro se extenderán, como mínimo, hasta fin de año. Así lo aseguró ayer el gobernador Miguel Saiz.
De esta manera y ante el complejo panorama actual para pagar setiembre, la incertidumbre de los estatales por los próximos salarios y el aguinaldo de diciembre va en aumento.
Por lo pronto, el gobierno provincial busca oxígeno. El mandatario viajó ayer por la tarde a Buenos Aires para reunirse con funcionarios nacionales en procura de fondos que permitan confirmar las fechas de pago. Además, participará de un nuevo encuentro de la Ofephi.
"El viernes -por hoy- o, a más tardar el lunes, daremos a conocer el cronograma", aseguró ayer Saiz, en una rueda de prensa. "Hay una deuda de dos cuotas del Plan de Financiamiento Ordenado que estamos tratado de que se liquiden para empezar con el cronogroma y la autorización del crédito que es de dominio público que estamos tramitando en el Ministerio de Economía", agregó. Dijo ser optimista en cuanto a los resultados de sus gestiones "porque no es un favor que estamos pidiendo a la Nación".
Después de admitir que es el peor momento financiero de su gestión, Saiz aseguró que "vamos a tener dificultades hasta fin de año".
"Lo venimos diciendo, todas las provincias han entrado en déficit primario, algunas tenían más ahorro y lo pueden ir capeando de manera distinta", completó.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Pablo Verani, quien también lleva adelante gestiones en Buenos Aires, explicó que "existe un compromiso del gobierno nacional de abonar las cuotas del Plan de Financiamiento, que deberían ser dos: la de septiembre que no se canceló y la de octubre". Verani sostuvo que ésa es una de las herramientas financieras que se llevan adelante para paliar la coyuntura. Otra es la obtención del crédito por 200 millones, para el cual el agente financiero -el Banco Patagonia- recurre a otras entidades para obtener recursos y prestárselos a la provincia. "Ese expediente -con la autorización de endeudamiento- está en el Ministerio de Economía a la espera de aprobación", dijo Verani.
Aunque nadie lo afirma taxativamente, la autorización de Nación está sujeta a decisiones políticas. Por eso Saiz se reunirá hoy -casi con seguridad- con el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, para que articule la definición.
La otra herramienta financiera que comenzará a ponerse en práctica en unos diez días es la emisión de cheques diferidos, permitidos por ley. "Serán para grandes proveedores y contratistas", aseguró Verani. De esta forma, se postergarán plazos de pagos y el efectivo podrá ir a salarios.
"El clima actual es el que venimos anticipando desde hace años. La preocupación del gobierno es una realidad y el margen para reducir gastos es muy acotado porque los mayores porcentajes son la coparticipación municipal y sueldos; el funcionamiento se ha bajado, pero representativamente no es mucho", admitió el ministro.