En La Defensa, un barrio que nació como asentamiento en las afueras de Cervantes, las mujeres son las protagonistas del proyecto. Esta semana iniciaron una serie de capacitaciones sobre producción de alimentos de la mano de técnicos del INTA.
Selva Sánchez, es otra de las alumnas que forma parte de este trabajo con enfoque territorial.
"Primero vamos a trabajar con una huerta para que después cada una pueda hacer pequeños cultivos en su patio", resaltó Selva.
Alrededor de 15 mujeres se fueron acercando de a poco y ahora con la ayuda de sus maridos comenzaron a labrar la tierra y cercar el predio del centro comunitario, donde realizarán las primeras plantaciones.
A través de un acuerdo con la municipalidad, este proyecto se relacionó con la fábrica de dulces que impulsará la comuna local. "Algunas mujeres ya tienen cultivos de frutillas y duraznos", comentó Selva demostrando el esfuerzo de muchas por aprovechar las riquezas naturales de la zona.
Reactivar el barrio no es sólo tarea de las mujeres, un grupo de 15 chicos coordinados por otro de los estudiantes - Adrián Quilapi-, pintó hace unos meses un mural en la entrada del barrio y ahora buscan retomar las actividades de la murga de Cervantes. (AR)