TUCUMÁN (Télam).- Una beba recién nacida que cayó desde el primer piso de un edificio, al parecer arrojada por su madre, se encuentra en buen estado de salud y se recupera en la Maternidad de la ciudad de Tucumán.
La pequeña, a la que llamaron Milagros porque no sufrió ninguna herida importante a pesar del tremendo impacto, sólo presenta un problema respiratorio menor, según la directora de la Maternidad, Rosana Chahla.
"Es un milagro que no tenga nada, ni un rasguño, según reflejan los estudios realizados", destacó.
Milagros está internada desde el miércoles en la sala de terapia y fue asistida con oxígeno debido a unos leves inconvenientes respiratorios que presenta, algo que los médicos consideran normal en un recién nacido.
Por otra parte, también fue internada en la Maternidad la madre de Milagros, una joven de 22 años que se encuentra con custodia policial por ser la principal sospechosa de haber arrojado a la beba.
Los investigadores creen que la joven, oriunda de Los Ralos, localidad ubicada al este de la capital tucumana, arrojó el miércoles a la beba desde un departamento del edificio donde trabaja hacia el patio de un vecino.
La pequeña cayó sobre un plástico extendido entre dos sogas, lo que amortiguó el impacto y salvó su vida.
Milagros nació con 2,935 kilogramos, un peso normal para un recién nacido con el embarazo a término.