Argentina quedó eliminada hoy en los cuartos de final de la Copa Davis tras perder por 3-2 la serie que disputó ante República Checa en la rápida carpeta sintética del estadio Cez Arena de Ostrava.
En el punto decisivo, el tandilense Juan Mónaco perdió en tres sets ante Radek Stepanek por 7-6, 6-3 y 6-2, y no pudo prolongar el envión obtenido en el primer turno por Juan Martín Del Potro, quien había superado a Tomas Berdych y emparejado la llave 2-2 con un triple 6-4.
Los dos puntos que sumó el equipo de Modesto Vázquez los consiguió Del Potro, quien en la jornada inicial ya había vencido a Ivo Minar, mientras que Mónaco cayó en sus dos presentaciones (la restante ante Berdych) y el dobles integrado por José Acasuso y Leonardo Mayer fue doblegada por la conformada por Berdych y Stepanek.
En el primer partido de hoy, Del Potro demostró no sólo un servicio contundente (18 aces) sino además un rendimiento sólido en todos los aspectos desde el primer juego de ese partido, para superar sin problemas a un Berdych que no presentó demasiada batalla.
Del Potro controló las acciones de principio a fin y sólo le dio una chance a Berdych en el cierre del segundo parcial, aunque rápidamente volvió a tomar las riendas de la situación y a seguir dominando el partido.
La primera misión estaba cumplida, le llegaba el turno a Mónaco, que se enfrentaba a un Stepanek disminuído en la teoría, pero no en la práctica, por una supuesta lesión en una de sus rodillas. Y el checo fue ampliamente superior al argentino en todos los aspectos.
En una superficie que le sentó por demás cómodo, Stepanek demostró una gran temple para capitalizar los vaivenes emocionales de un rival que cuando estuvo metido en el partido le generó algunos inconvenientes, pero que cuando fue preso del nerviosismo porque las cosas no le salieron cometió graves errores.
Parecía que Mónaco se llevaba el primer parcial cuando quebró el servicio de Stepanek para ponerse 6-5 pero el checo, 22 en el ranking mundial, hizo lo propio con el tandilense y se llevó el primer parcial con un tie break por 7-5.
El segundo fue neto dominador el checo y el tercero, tras un comienzo parejo, Stepanek fue dominador psicológico ganando puntos en los que Pico tenía todo a su favor.
El llanto de Mónaco, que llegó al segundo single por la ausencia del convaleciente David Nalbandian, marcó el ánimo del final, en la que Argentina no pudo no pudo repetir lo hecho en 2008, cuando perdió la final con España como local. Los checos, favoritos en la previa por la superficie en que se jugó, se quedaron con el pasaje a las semifinales, instancia en la cual se medirá con Croacia, verdugo de Estados Unidos.
DyN