La decisión del Concejo de impugnar a Walmart deja un precedente nada alentador en una ciudad de la envergadura de Bariloche.
? Se rechaza una inversión de casi tres millones de dólares en momentos en que el país sufre la falta de fondos y el inversor se ve desestimulado.
? Se pierde la oportunidad de nuevos puestos de trabajo tanto para la etapa de la construcción como para el funcionamiento del comercio. Algo clave para una sociedad que hoy tiene un mercado laboral resentido por la caída que sufre la industria del turismo.
? Se priva a la población (sobre todo la de los sectores Altos de la ciudad) de una deseable competencia con la llegada de nuevas bocas de venta minoristas y la oportunidad de obtener precios más bajos de la canasta de productos, hoy considerada en Bariloche como una de las más caras en la región. A la vez, comercios más pequeños podrían plantear estrategias creativas para cautivar clientes.
? No se comprende por qué se discrimina a una firma supermercadista con el argumento de la defensa del comercio local, cuando ya existen dos empresas extrarregionales del rubro que están hace tiempo en Bariloche.