BUENOS AIRES.- La fuerte merma que tendrá la producción de granos y oleaginosas cuya colecta está finalizando, dejará unos 27 millones menos de toneladas de las que se obtuvieron durante el ciclo 2007/2008, que se traducirá en una caída en las exportaciones del sector por un valor estimado a ayer en 12 mil millones de dólares menos.
Datos relavados por técnicos de la Sociedad Rural Argentina (SRA) muestran que en la campaña anterior, la sumatoria de todos los productos agrícolas trillados exhibió un saldo de zafra de 95 millones de toneladas, mientras que este año ese guarismo superaría levemente los 62 millones de TN, según las proyecciones más optimistas.
Otros analistas de la actividad granaria consideran que ese volumen de cosecha podría caer más, debido a la importante merma que están mostrando los rendimientos de la soja que se está trillando y para cuya cosecha se reducen la productividad semanalmente.
Distintos economistas calculan menores ingresos para el fisco por 5 mil millones de dólares, con el mejor pronóstico productivo de 68 millones de toneladas, de acuerdo a datos proporcionados por consultoras privadas, cuando aún resta cosechar alrededor del 43 por ciento de la soja nueva, que este año cubrió un área de 17,3 millones de toneladas. Aunque la siembra fue record, los rindes bajaron el promedio normal de 2.780 kilos por hectárea hasta ubicarse en 2.200 kilos ya que se produjo el fenómeno de bajo peso de los granos, según datos relevados desde las Bolsas de Cereales de Buenos Aires y de Comercio de Rosario.
En esa línea, Rogelio Pontón, director de estudios y estadísticas de la Bolsa de Comercio de Rosario, la sequía, menor inversión agrícola y las restricciones comerciales "llevarán a casi la mitad las exportaciones de granos que pasarán de 30 mil millones de dólares a 16 mil millones de dólares", dijo.