COMALLO (AJ).- Vecinos y funcionarios municipales de Comallo decidieron aunar esfuerzos y recursos para afrontar la crisis, en el marco de una inédita experiencia que está dando resultados positivos.
Ante la difícil situación económica, que golpea duro a los más débiles, ambas partes decidieron agudizar el ingenio, juntar las ganas y darse una mano mutua.
Hace algunos meses algunos funcionarios y otros trabajadores del municipio comenzaron a recorrer los barrios recogiendo las demandas de los vecinos para buscar en conjunto las formas de hacerle frente a las necesidades más urgentes. Se detectaron problemas de empleo, de limpieza y habitacionales, entre otros.
"Hay muchas necesidades en la gente más humilde, pero la mayoría tiene problemas edilicios y hoy, debido a la situación, el municipio no tiene todos los recursos para poder ayudarlos como corresponde. Tampoco sirve quedarse sentado viendo pasar la crisis. Entonces decidimos poner lo que tiene cada uno para buscarle soluciones a los problemas. Algunas familias tenía una bolsa de cemento o hierro, se juntaron para vender ropa usa o empanadas para comprar materiales y así empezamos" señaló el secretario de Hacienda del municipio, Raúl Hermosilla.
En este marco solidario, los vecinos aportan cemento, cal y hierro y el municipio -que consiguió prestada una fábrica de bloques- puso cemento y áridos, entre otras cosas. Ambas partes aportan la mano de obra y fabricaron así más de 3.000 bloques de cemento para comenzar a levantar paredes.
Actualmente 48 familias de distintos barrios trabajan mancomunadamente junto a funcionarios y operarios municipales en la ampliación y refacción de viviendas. Con el asesoramiento técnico adecuado, hacen las zanjas para los cimientos, preparan la mezcla con arena y cemento y realizan trabajos de mampostería en 15 casas de la zona urbana y en 4 de la rural. En su mayoría los beneficiarios son jubilados, pensionados o vecinos que reciben becas que apenas les alcanzan para comer. "A pesar de la adversidad y la crisis, comprobamos que aunando esfuerzo y siendo solidario se pueden lograr grandes cosas" señalan orgullosos los vecinos.
Los buenos resultados dieron impulso a otros proyectos. Así empezaron a trabajar en proyectos de huertas y granjas. También generó un gran interés en el Instituto Cordillerano de Estudios Patagónico. ICEP, quien manifestó su intención de sumarse a la iniciativa.
