WASHINGTON (AP).- El presidente brasileño pidió al presidente Barack Obama adoptar "decisiones más firmes´´ para superar la crisis financiera global y no dejar pasar su "oportunidad histórica´´ de mejorar las relaciones de Estados Unidos con América Latina.
"La crisis política puede resolverse con una decisión política firme en la reunión del G-20´´, dijo Luiz Inacio Lula da Silva hablando al lado de Obama en la Casa Blanca, luego de una entrevista de más de una hora.
"Lo primero que se requiere es restaurar la credibilidad de nuestras sociedades en el sistema financiero´´.
Al mismo tiempo, Obama y Lula se mostraron unidos en rechazar el proteccionismo comercial, aunque reconocieron que en el plano bilateral sus controversias no van a desaparecer "de la noche a la mañana".
"Nuestro objetivo como mínimo no es ir hacia atrás", dijo Obama. "Las empresas estadounidenses se beneficiarán de nuestras exportaciones, e importaciones de Brasil pueden darnos acceso a productos y servicios en Brasil", añadió Obama, al ser preguntado sobre recientes disposiciones de su gobierno de tilde proteccionista, como cláusulas para "Comprar estadounidense" (Buy American) en su paquete de estímulo económico.
Obama reiteró que su gobierno acatará las obligaciones de la Organización Mundial de Comercio. "Quizás sea difícil para nosotros finalizar toda una batería de acuerdos comerciales en medio de una crisis económica como esta, aunque estamos comprometidos con nuestros socios brasileño para sentarnos e intentar (...) cerrar la distancia en la Ronda Doha" de liberalización comercial, añadió.
"Quizás no suceda de la noche a la mañana", enfatizó Obama, pero ello no significa que defender los empleos sirva para "erigir una muralla".
"En medio de esta crisis económica es difícil llegar a un acuerdo", reconoció igualmente Lula, el primer presidente latinoamericano que se reúne con Obama desde que éste asumió el poder. "Pero (la Ronda Doha) sería uno de los componentes para aliviar a los países emergentes", añadió.
"El proteccionismo en estos momentos significaría agravar la crisis económica", dijo el brasileño, quien reiteró que Brasil ha hecho "esfuerzos enormes" para concluir con éxito la Ronda, iniciada en 2001
En una demostración del peso internacional que Estados Unidos le otorga a Brasil, la crisis fue el principal tema del diálogo de ambos en la Oficina Oval, junto con la cooperación en los campos energético, biocombustibles y pobreza, junto a las relaciones bilaterales y de Estados Unidos en general con América Latina, dijeron los dos presidentes.
Lula declaró que Obama tenía "una oportunidad histórica´´ en las manos para "mejorar las relaciones de Estados Unidos con América Latina´´, que durante el gobierno de Bush llegaron a su nivel más bajo en décadas.
Obama, dedicado desde que asumió el gobierno hace siete semanas a estimular la economía de Estados Unidos, donde se originó la crisis que estaba llevando al mundo a la recesión, elogió el liderazgo de Lula en lo que fue su primera entrevista con un presidente latinoamericano en la Oficina Oval.
Pidió a los inversores tener "confianza absoluta´´ en la solidez de los Estados Unidos y dijo que su campaña a favor de la regulación financiera será el "frente y centro´´ de su participación en la cumbre del G-20.
El acuerdo más importante en la primera reunión del G-20 -grupo que conforman las naciones más ricas del mundo y las más ricas entre las economías emergentes- fue rechazar cualquier intento de proteccionismo que obstruya el flujo mundial de comercio. Pero muchos países, especialmente los más ricos, incluido Estados Unidos, no lo han respetado.
Lula declaró que el mundo esperaba la reactivación de las conversaciones de la ronda Doha.