| "Hay que vivirlo y estar con ellos para darse cuenta realmente lo que significan estas jornadas para estos niños y ver que en una escuela de pueblos grandes o ciudad los niños tienen demasiado y otros lugares tan poco" señaló la profesora de educación física Elsie Zamataro, quien junto a otros dos profesores y dos alumnos del Instituto de Educación Física de Viedma, coordinaron los juegos recreativos. Si bien trabajó durante muchos años en la escuela rural del paraje El Gualicho, cerca de Río Colorado, vio una realidad muy distinta en esta zona. Con asombro, la mujer detalló que al principio cuando se les daba una pelota -de básquet, vóley o fútbol- instintivamente los niños comenzaban a patearla porque al no haber profesores de educación física en las escuelas rurales una de las pocas disciplinas deportivas que practican es el fútbol. "En las grandes ciudades o pueblos un profesor de educación física saca un elemento de colores o una pelota de básquet y los chicos se ponen a jugar en forma normal. Para la mayoría de los niños era todo novedad. A aquellos es difícil conformarlos a pesar de que uno pude contar con muchos elementos y estos con un globo y tres caramelos o juegos simples son felices" agregó. Debido al éxito que tienen las Olimpiadas Rurales en Comallo y para llegar con estas jornadas de integración a más niños de la zona, el presidente de la Agencia Deportes de Río Negro, Ricardo Vélez, afirmó "la idea de replicar esta experiencia en dos o tres lugares de la Región Sur para que todos los niños de los parajes puedan participar de esta fiesta. Es importante que los vivan". (AJ) | |