El gobierno argentino dispuso ayer el envío de ayuda para los habitantes de las localidades chubutenses de Esquel y aledañas, ante la inminencia de la llegada de las cenizas despedidas por el Volcán chileno Chaitén.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner se comunicó con el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, para articular todas las medidas necesarias que permitan asistir a la población afectada.
"De inmediato dispuso que a través del Ministerio de Desarrollo Social y el de Salud se haga llegar la ayuda necesaria para atender la emergencia", señaló un comunicado.
"El gobierno nacional asistirá a los habitantes de las localidades afectadas con 51.570 litros de agua mineral, barbijos, pastillas potabilizadoras, medicamentos y pipetas para nebulizadores", se agregó oficialmente.
No obstante, la caída de ceniza volcánica disminuyó ayer por la tarde en Chubut y al caer la noche ya no se la sentía en el ambiente, según informó Carlos Mantegna, intendente de Trevelin, la localidad cordillerana más afectada por la fumarola.
El jefe comunal confirmó que "si bien por ahora no hay efectos importantes, hemos puesto en marcha un plan de contingencia para lo cual se comunicó conmigo el gobernador Mario Das Neves". (Télam)