BUENOS AIRES (Télam).- El estreno del filme "Operación Valquiria" reactivó el interés por Adolf Hitler a partir de una serie de libros publicados sobre el fallido atentado contra el líder nazi que dio origen a la película protagonizada por Tom Cruise.
Pocos personajes históricos han encarnado el mal como el líder del Tercer Reich. Tal vez eso explique por qué matar a Hitler llegó a convertirse en una obsesión para simples artesanos, altos oficiales, apolíticos, agentes del enemigo y hasta sus más íntimos colaboradores, entre ellos el coronel Claus Stauffenberg.
"Operación Valquiria" narra justamente el plan de este aristócrata católico alemán, aficionado a la literatura, oficial de las Wehrmacht y comandante de las Walkire (las reservas de la Armada) que decidió atentar contra su líder tras conocer las atrocidades perpetradas por las SS contra civiles de los países enemigos, y en especial contra los judíos.
El 20 de julio de 1944, después de unirse a la resistencia germana contra el régimen nazi, Stauffenberg ejecutó un fallido atentado contra Hitler, que fracasó al comprobarse que el líder nazi había salido con apenas rasguños de la fuerte explosión.
Por la acción fueron detenidas más de 5.000 personas y ejecutadas unas 200 (el coronel incluido), lo que significó el desmantelamiento definitivo del movimiento de resistencia.
"Operación Valquiria" llega precedido por una polémica luego de que distintas voces críticas -entre ellas la de la familia del coronel- señalaran que Cruise no es el indicado para representarlo dada la afiliación del actor a la secta de Cienciología, una organización a la que en Alemania se acusa de tener tendencias totalitarias.
El episodio del atentado al líder nazi es también recreado con detalle en "Matar a Hitler", obra del historiador Roger Moorhouse que rastrea la historia de los hombres y mujeres que intentaron eliminarlo en distintas ocasiones, desde pistoleros solitarios y oficiales alemanes desafectados al régimen, hasta agentes del NKVD soviético y del SOE británico.
El libro, editado recientemente por el sello Debate, relata la conjunción de planes, motivos y fracasos en los intentos por asesinar al jerarca nazi, a la vez que funciona como la crónica de la asombrosa supervivencia de un tirano.
Moorhouse documenta cómo los métodos propuestos para asesinar a Hitler iban desde la utilización de explosivos, venenos o francotiradores hasta infiltrar agentes en las SS, o incluso mandar a Rudolf Hess de vuelta a Alemania hipnotizado para que acabara con él.
Paralelamente hace unos meses se publicó "Queríamos matar a Hitler", basada en el testimonio de Freiherr Von Boeselager Philipp, el último sobreviviente de la operación Walkiria, que conformó a su vez el último intento frustrado de asesinar al Fürher en julio de 1944.
Editada por Editorial Ariel, la obra es un testimonio excepcional sobre el compromiso ético y la brutalidad de la guerra, escrita por quien emprendió el camino de la desobediencia -alta traición en la Alemania de Hitler- y luchó en el durísimo frente junto a los rusos.
Además, en los próximos días llegará a la Argentina un volumen que reúne las cartas que el conde Helmunt James von Moltke escribió mientras planeaba el asesinato de Hitler, y que llegará editada por el sello Acantilado bajo el título de "Informe desde Alemania en el año 1943. Ultimas cartas desde la cárcel de Tegel, 1945".
El libro, una de las obras en las que justamente se inspiró "Operación Valquiria", está narrado a partir del conde, un culto aristócrata, jurista de profesión, que ilustra la resistencia civil que muchos alemanes encarnaron contra el nacional socialismo.
En la introducción de la obra Freya von Moltke, viuda de von Moltke, relata que cuando comenzó la Segunda Guerra Mundial su marido fue convocado como especialista en derecho internacional para integrar el Oberkommando de la Wehrmacht de Berlín, del que formó parte hasta su detención en 1944.
Finalmente, en España se publica por estos días "Stauffenberg", una espléndida biografía del ejecutor del atentado escrita por el historiador Peter Hoffmann, que el sello Destino seguramente traerá a la Argentina en las próximas semanas.