| WASHINGTON (AFP).- El vasto plan de reactivación aliviará la economía dañada por la recesión pero no de manera tan rápida como se espera, según analistas. El plan prevé medidas de reducciones impositivas por 286.000 millones de dólares, cerca de un tercio del monto total, con el fin de reactivar el consumo. Su impacto debería sentirse paulatinamente. El programa de gastos podría, en cambio, producir un efecto más lento si se tiene en cuenta el tiempo que va a requerir la aprobación y la financiación de los diferentes proyectos, insisten los expertos. El resto del monto aprobado será volcado a la construcción y restauración de infraestructura, y a otros programas que conciernen a la educación, la salud o las energías limpias, pero se prevé que se realizarán entre 2009 y 2010. Los economistas de Barclays Capital estiman que 245.000 millones de dólares de esta partida del plan se gastarán en 2009, pero sólo 81.000 millones de éstos durante el primer semestre. En términos de impulso para la economía, el plan es "realmente ineficiente", concluyó Harris. Para la consultora BMO Capital Markets, el plan de reactivación "no cambia el hecho de que nos enfrentamos a la mayor recesión desde los años 1930". "La mayoría de las medidas alentadoras llegarán en el segundo semestre y en 2010, cuando los proyectos de infraestructura habrán sido elaborados y puestos en marcha", añadió. | |