Los pilotos de F-1 no firmaron sus licencias 2009 porque el organismo rector del deporte aumentó el precio del documento. El valor de la súper licencia aumentó de 400 a 10.400 euros y la Federación Internacional de Automovilismo argumentó que el aumento es necesario para cubrir los gastos de seguridad.
La FIA también aumentó el costo de ganar, ya que cada punto del campeonato subió de precio de 100 a 2.100 euros. Los pilotos también tendrán que pagar un seguro obligatorio de 2.720 euros.
Con todos los aumentos, el campeón mundial Lewis Hamilton tendrá que pagar casi 220.000 para competir este año. Seguro que los tiene, pero...