El gobernador chaqueño Jorge Capitanich decretó la emergencia agropecuaria en su provincia por un lapso de 180 días por la sequía, mientras que su par bonaerense, Daniel Scioli, sobrevoló varios partidos de la cuenca del Salado afectados por la falta de lluvias.
En el caso del Chaco, Capitanich dispuso promover la emergencia agropecuaria en todos los departamentos de la provincia y accedió así al reclamo cursado por ruralistas que realizaron un encuentro multitudinario en la localidad de Charata.
El campo en el Chaco sufrió durante el 2008 déficit hídrico de hasta 700 milímetros, situación que se extendió hasta la actualidad, donde la producción agropecuaria por la falta de lluvias se registran pérdidas superiores al cincuenta por ciento en producción y calidad. Por su parte, Daniel Scioli, sobrevoló la zona de la cuenca del Río Salado para evaluar la intensidad de la sequía. Varios municipios ya solicitaron y lograron que el gobierno provincial declarara la emergencia agropecuaria en sus zonas, mientras que otras áreas están siendo evaluadas. El gobernador señaló que la mesa agropecuaria de emergencia provincial "está atendiendo caso por caso todos los planteos".
